La Policía Nacional ha detenido a tres hermanos originarios del Camerún acusados de un delito contra la salud pública, tráfico de drogas, pertenencia a organización criminal y blanqueo de capitales. Los arrestados introducían heroína a Cataluña obtenida en su país natal, desde donde la transportaban escondiéndola dentro de sus organismos. Los tres han sido pillados en el aeropuerto del Prat, y han ingresado en prisión de manera provisional después de haber pasado a disposición judicial.
La desarticulación de este grupo se ha llevado a cabo en tres fases. La primera empezó con la detención de uno de ellos en marzo del 2022, cuando el hombre llegó a Barcelona con 1.147 gramos de heroína que se había tragado antes de salir de Camerún, con el evidente riesgo que eso suponía para su salud. Esta primera detención hizo saltar las alarmas ante la posibilidad de que una banda criminal estuviera introduciendo este tipo de droga a través de Barcelona. De esta manera, la policía judicial del aeropuerto empezó una investigación gracias a la cual tuvieron conocimiento que el detenido tenía dos hermanos, y las perquisiciones se centraron en el seguimiento de su actividad.
Tomaban muchas medidas de seguridad
Los agentes descubrieron que los hermanos, que hacía tiempo que vivían en Barcelona, viajaban con mucha frecuencia a su país, donde tenían vínculos muy estrechos, hecho que dificultaba el trabajo de los investigadores. Además, planeaban muy bien sus incursiones: permanecían una media de quince días en Camerún, tiempo durante el cual obtenían la droga, y conseguían borrar sus nombres de la base de datos de los pasajeros de los vuelos de ida y vuelta, para ocultar así los numerosos desplazamientos que efectuaban.
Sin embargo, no se quedaban solo en territorio catalán. Los investigadores detectaron muchos viajes también a Francia. Durante uno de estos pudieron detener el segundo miembro del grupo, también en el aeropuerto de Barcelona. Este segundo hermano escondía en el estómago 321 gramos de heroína y 84 gramos de éxtasis en pequeñas cápsulas que había ingerido previamente con líquidos. La última fase de las investigaciones culminó el pasado mes de febrero. El último de los hermanos que quedaba en libertad fue pillado cuando volvía de Camerún transportando 770 gramos de heroína, además de 42.345 euros en efectivo.
Se escondían en Sant Boi de Llobregat
La Policía Nacional detectó la compra de una vivienda en Sant Boi de Llobregat (Baix Llobregat) donde los tres hombres habían fijado su residencia en Cataluña. Durante la entrada y registro del inmueble se decomisaron 2 kilos de heroína, así como otras drogas, 42.000 euros en efectivo y pruebas de haber ingresado 120.000 euros en cuentas bancarias obtenidas presuntamente del tráfico de heroína.