Al menos tres personas murieron y otras 24 resultaron heridas este miércoles tras un ataque con explosivos en la ciudad de Quetta, de la provincia de Baluchistán, en el suroeste de Pakistán, informaron fuentes oficiales.

El ataque, cometido con un artefacto explosivo a control remoto oculto en una caja, ocurrió la tarde de hoy justo cuando un grupo de policías salía de una furgoneta, causando la muerte de un agente y otras dos personas aún sin identificar, dijo a Efe el oficial de policía Shehzad Gul: "Otras 24 personas, incluidos dos policías, resultaron heridos", dijo el funcionario.

Las autoridades han impuesto medidas de emergencia para que los hospitales de la ciudad, médicos, y personal paramédico garanticen su presencia en los centros de atención. De momento, ningún grupo armado se ha atribuido la responsabilidad de la explosión.

"Terroristas cobardes atacaron a ciudadanos inocentes en un atentado terrorista", dijo en un comunicado el jefe de gobierno de la provincia de Baluchistán, Abdul Qudoos Bizenjo. De acuerdo con Bizenjo, en este momento los grupos armados de la región "están haciendo esfuerzos para perturbar la paz en Quetta y la provincia bajo una conspiración planificada y bien pensada". El gobernante regional pidió "utilizar todos los recursos para llevar a los responsables del incidente ante la justicia", según el escrito.

Tensión en Pakistán por la situación en Afganistán 

Pakistán vive en este momento una escalada de violencia insurgente que coincide con la llegada al poder de los talibanes en el vecino Afganistán y la retirada de las tropas internacionales. Las fuerzas paquistaníes han sido blanco de varios ataques en Baluchistán en las últimas semanas, que han dejado más de una decena de soldados muertos, varios de ellos reivindicados por el Ejército de Liberación Baluchi (BLA).

La provincia de Baluchistán, la más extensa y menos poblada de Pakistán, es escenario habitual de violencia con la presencia de grupos armados, facciones talibanas y grupos yihadistas. Varias organizaciones armadas impulsadas por sentimientos separatistas de la etnia baluchi, incluido el BLA, han estado luchando contra el Gobierno durante décadas por la formación de un Estado independiente.

Las regiones más conflictivas del mundo

El África subsahariana, con la región del Sahel como epicentro, registró en 2021 un 48% de las muertes por terrorismo a nivel mundial, por grupos afiliados al Estado Islámico (EI), mientras que los ataques se redujeron un 68% en los países occidentales, donde tuvieron una motivación más política que religiosa.

El noveno Índice de Terrorismo Global (GTI, en inglés), difundido este miércoles, señala que las muertes por actos terroristas cayeron un 1,2% el año pasado, hasta 7.142, al tiempo que los atentados aumentaron un 17%, a 5.226, lo que demuestra que "el terrorismo es cada vez menos letal", en un reflejo del nivel de organización y eficiencia de los perpetradores.

Según este informe elaborado por el australiano Instituto de Economía y Paz, el terrorismo se concentra cada vez más en zonas de conflicto -donde hubo un 97% de las muertes-, con Afganistán a la cabeza de una clasificación de 163 territorios en la que los de América Central y el Caribe figuran como los menos impactados por esa lacra.

En los países europeos, así como en Estados Unidos, Canadá, Australia o Nueva Zelanda, los ataques inspirados por ideologías políticas de izquierdas o de derechas son ahora cinco veces más comunes que los religiosos.