Asesinado a martillazos y sangre fría un estudiante indio de 25 años en una tienda de Estados Unidos. Un sintecho y drogadicto llamado Julian Faulkner, de 53 años, golpeó sin piedad el pasado 16 de enero a Vivek Saini con un martillo, casi 50 veces, en la cabeza mientras trabajaba a tiempo parcial en un establecimiento de la ciudad de Lithonia, en el Estado norteamericano de Georgia. Los vídeos del crimen han corrido como la pólvora en redes sociales, algunos sin pixelar, que dejan ver el daño irreparable que el hombre le produjo en la cara y la cabeza al joven, del cual certificaron la muerte en el mismo supermercado de la gasolinera Chevron.
El sintecho, Faulkner, había permanecido en la tienda unos días antes, desde el 14 de enero, y le habían suministrado algunos artículos de forma gratuita. De hecho, la víctima, según han apuntado diferentes medios indios y estadounidenses, había mostrado amabilidad por el hombre y lo había estado ayudando los últimos dos días. Pero, finalmente, Saini le pidió que se fuera y el hombre respondió con extrema violencia. Fue a por un martillo y sin mediar palabra comenzó a golpearlo en la cara y en la cabeza. Hasta 50 veces le alcanzó con la herramienta, pese a que el joven estudiante -y recién graduado de un máster en administración de empresas en Estados Unidos- ya había muerto durante los primeros martillazos.
25-year-old Vivek Saini was attacked with a hammer by a homeless man at the Chevron Food Mart at Snapfinger and Cleveland Road in Lithonia late Monday night. #Homeless #usa #indian #internationalstudents pic.twitter.com/Cy2gL1tytH
— Gurpreet Kohja (@KhuttanGuru) January 22, 2024
Detenido por el asesinato a martillazos del joven de 25 años
La policía acudió poco después alertada por algunos testigos y, al llegar, vieron a Faulkner todavía con el martillo en la mano y junto a la víctima. El hombre no quería soltar el arma, pero finalmente fue detenido y las cámaras de seguridad del establecimiento registraron el atroz y horrible momento en el que acaba con la vida del joven originario de la India. El sintecho y drogadicto está acusado de asesinato con mala intención e interferencia con la propiedad del gobierno. Según han explicado algunos medios del país asiático como el Hindustan Times, los padres del chico, Gurjeet Singh y Lalita Saini, están devastados y han decidido no dar más detalles sobre el trágico incidente, tan solo han definido a su hijo como un joven prometedor y un estudiante brillante que luchaba por conseguir un trabajo decente.