Un hombre ha sido detenido por simular un infarto con el objetivo de robar a la persona que parara su vehículo y lo llevara al hospital para que lo atendieran. El ladrón, sin embargo, no consiguió lo que quería y tuvo que acabar golpeando a una mujer con dos barras de acero para robarle el bolso de mano. Después de pasar a disposición judicial, el juez ha decretado su ingreso en la prisión provisional, comunicada y sin fianza.
El hombre simuló que sufría un infarto para robar a la persona que lo ayudara
Los hechos tuvieron lugar alrededor de las doce y media de la madrugada del pasado lunes, 31 de octubre, en la calle Benjamín Ortíz de Oviedo. Un hombre simuló que sufría un infarto en medio de la calle y empezó a hacer señales a un coche que pasaba para que se detuviera. Cuando el vehículo se paró, le pidió al conductor que lo llevara al Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA).
Este accedió, pero cuando todavía quedaban unas calles para llegar, el ladrón le pidió que parara el vehículo y le entregara la cartera. Ante su negativa, el acusado lo empezó a agredir, se abalanzó sobre él, abrió la puerta del conductor y lo echó a empujones. El propietario del vehículo se cayó al suelo, momento en que el detenido intentó robarle el coche. No obstante, se trataba de un vehículo automático y no lo pudo arrancar, así que tuvo que huir corriendo a pie. El conductor resultó herido con un politraumatismo en el hombro derecho.
El ladrón intentó robar a dos chicas que lo acabaron persiguiendo
Después de huir del intento de robo frustrado, el detenido se detuvo a un par de calles más allá cuando vio que dos chicas estaban a punto de entrar en un portal. Se quedó esperando que entraran y entonces les fue por detrás, golpeó con fuerza a una de ellas, le cogió el bolso y salió corriendo. Las dos mujeres salieron detrás de él y lo consiguieron atrapar, pero el ladrón empezó a dar golpes con dos barras de acero a la joven a quien había sustraído el bolso y lo intentaba recuperar. La chica resultó herida con un traumatismo costal.
Una patrulla de la Policía Local de Oviedo pudo detener al hombre en el mismo lugar de los hechos. Después de pasar a disposición judicial, el juez ha decretado su ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza, a la espera de que se celebre un juicio rápido en un juzgado de lo penal. La Fiscalía pide para él cinco años y medio de prisión por dos delitos de robo con violencia en grado de tentativa y dos delitos de lesiones. Además, solicita que se indemnice a las víctimas por las lesiones sufridas.