Es común que muchos de nosotros tengamos algunas manías o gestos conduciendo que no son adecuados según las normas de tráfico. El desconocimiento del reglamento no exime de cumplirlo por lo que debemos estar atentos a los cambios y faltas para no cometerlas y exponernos a ser multados.
La Dirección General de Tráfico (DGT) siempre está atenta a las nuevas tendencias en el ámbito de la conducción por lo que actualizan las normativas para que se adapten a los usuarios y las tecnologías.
El trabajo de la DGT es el de asegurarse de que los peligros de las carreteras y las calles se reducen considerablemente para que los conductores, sus acompañantes y los peatones no sufran daños.
La curiosa multa a un conductor
Muchas personas optan por poner las luces de emergencia para avisar a los coches que vienen detrás que hay una retención que puede ser provocada por obras o un accidente. Pues esta misma acción la hizo un conductor y fue sancionado por ello.
Los agentes detuvieron al conductor y le explicaron la razón de la sanción. Le comentaron que estaba infringiendo el artículo 109 del Reglamento General de Circulación. Por lo visto, se debe señalizar una retención a través de avisos reiterados con las luces de freno o agitando el brazo de arriba a abajo.
La multa por poner las luces de emergencia en esta situación puede ser de 80 euros a un máximo de 200 euros. Conviene conocer esta norma, ya que es una acción que mucha gente hace sin saber que está prohibido.
Se recomienda repasar las normas del Reglamento General de Circulación para evitar tener este tipo de problemas por una acción que creemos que estamos haciendo bien. A nadie le apetece tener que pagar una multa.
Las nuevas medidas de la DGT
Desde la DGT trabajan sin descanso para adecuar las normas a los tiempos actuales. Los cambios tecnológicos en los vehículos y en los elementos de la carretera lo exigen.
De hecho, se está estudiando implementar una nueva medida de seguridad para los motoristas, el airbag que se colocaría como una prenda más de vestir y se activaría en el caso de que el conductor sufra un accidente y caiga al suelo.
Por el momento no es una medida obligatoria, pero se está estudiando. Podría ayudar a salvar muchas vidas y evitar consecuencias mayores en caso de sufrir un accidente. Ya lo están utilizando algunos agentes de la Guardia Civil y Pere Navarro no descarta que en un tiempo se implemente de la misma forma que se hizo con el casco.
L'objectiu és reduir els accidents i les seves conseqüències. De fet, en la nova actualització del reglement s'han regulat els problemes dels patinets elèctrics i s'ha implementat una esmena que obliga que siguin utilitzats amb casc de seguretat.