Ata al perro en la entrada de una tienda de Barcelona y lo intentan secuestrar. La Guardia Urbana de Barcelona ha pillado con las manos en la masa a un individuo cuando se llevaba por la fuerza un cánido que su propietario había dejado atado a la puerta de un establecimiento comercial en el distrito barcelonés de Ciutat Vella, mientras compraba. Los agentes, al presenciar los hechos, han actuado y han detenido al supuesto ladrón o secuestrador. Además, han recuperado al animal, llamado Bandido, que ha sido devuelto inmediatamente después a su dueño, sano y salvo.

¿Dejas el perro atado para comprar en una tienda? También hay una sanción para esto

Por todo ello, dejar atados a los perros en la puerta de los establecimientos comerciales de toda España está prohibido. Concretamente, desde la entrada en vigor el 29 de septiembre de 2023 de la Ley de Protección de los Derechos y Bienestar Animal. Esta normativa prohíbe exhibir mascotas en los escaparates, comprarlas en tiendas o por internet u otras acciones. Además, se acordó hace más de un año que los dueños de los animales estaban obligados a partir de ahora a contratar un seguro de responsabilidad civil. Más allá de todo esto, hay algunas actuaciones que son sancionables, como la mencionada más arriba.

Atar al perro a la puerta del comercio, como por ejemplo un supermercado, una tienda de ropa o una pastelería; mientras el propietario está dentro comprando, está prohibido desde septiembre de 2023. De hecho, ya se impusieron las primeras sanciones en diferentes puntos del territorio español al día siguiente de la aprobación de la ley, basándose en el apartado d del artículo 27 de la normativa, el cual especifica que está prohibido mantener a los animales de compañía "atados o deambulando por espacios públicos sin la supervisión presencial por parte de la persona responsable de su cuidado y comportamiento". Así, la sanción en este caso puede ir de los 50 hasta los 200.000 euros, según la gravedad de la infracción. Por todo ello, además de las altas posibilidades de que roben al cánido, como ha pasado en Barcelona, es recomendable entrar en el establecimiento con el animal o, en todo caso, no hacerlo en aquel momento.