Un padre ha ingresado en prisión en Granada después de secuestrar a su propio hijo con discapacidad y obligarlo a hacer de jardinero en sus plantaciones de marihuana. Lo hacía, además, con la ayuda de otro hijo menor de edad, hermanastro de la víctima, que también ha sido detenido. La liberación del chico es el fruto de una investigación, bajo el nombre de operación Damasco, que se inició al recibir la denuncia por el secuestro, durante semanas y de manera reiterada, de la víctima.
Secuestrado y obligado a trabajar en plantaciones de marihuana
Tanto su padre y su hermanastro, de nacionalidad española y de origen sirio, lo tenían privado de libertad durante semanas y lo encerraban en viviendas convertidas en plantaciones de marihuana a fin de que vigilara la droga. Además, aprovechaban su discapacidad intelectual para tenerlo amenazado y acobardado. Una de las plantaciones en las cuales tenía que vivir, incluso, se encontraba en condiciones de insalubridad extremas, lleno de escarabajos y otros insectos.
Finalmente, después de recoger todos los indicios necesarios, los investigadores de la Policía Nacional procedieron a registrar cuatro viviendas en el distrito Norte de la ciudad de Granada en las cuales sospechaban que estarían los cultivos de marihuana. Allí encontraron tanto a la víctima como a los dos familiares que lo habían secuestrado. Los agentes consiguieron intervenir más de 400 plantas de marihuana, instrumental para la fabricación de hachís y una pistola de aire comprimido. Tanto el padre como el hermanastro quedaron detenidos acusados de los delitos de detención ilegal, tráfico de drogas y defraudación de fluido eléctrico. En el caso del padre, que ya contaba con antecedentes policiales previos, el juez ha decidido enviarlo a prisión.