Los Mossos d'Esquadra han detenido a un vecino de Tarragona de 48 años acusado de un delito de hurto y otro de resistencia y desobediencia en la autoridad. La detención, concretamente, la hizo un agente fuera de servicio que estaba haciendo la compra en un supermercado de Salou el pasado 1 de febrero. Eran las cinco de la tarde cuando vio que dos personas empezaban a correr por uno de los pasillos y salían por la puerta de seguridad del local, ubicado en la calle Alexander Fleming de la capital de la Costa Dorada, mientras los trabajadores no lo dejaban de gritar para que se detuvieran.

Uno de los ladrones detenido y el botín perdido por el camino

El agente no se lo pensó dos veces, salió corriendo detrás de los ladrones y los empezó a perseguir por los alrededores del establecimiento. Se identificó como agente de los Mossos d'Esquadra y les pidió que se detuvieran, pero los delincuentes se hicieron los sordos con las indicaciones y siguieron con su huida. A uno de ellos, el policía lo pudo atrapar y le hizo un placaje. A pesar de los intentos del ladrón para sacárselo del encima, este lo pudo inmovilizar y detener. Una vez llegó la patrulla de los Mossos desplazada al recibir el aviso del robo, se los entregó para que lo llevaran a comisaría.

Con respecto al otro ladrón, pudo escapar sin ser detenido. Sin embargo, lo hizo sin el botín que él y su compañero habían conseguido llevarse del supermercado. El vigilante de seguridad del establecimiento, que salió corriendo último el agente fuera de servicio para ayudarlo, encontró la bolsa con los diversos productos para comer que habían sustraído tirada por el suelo. Según pudieron comprobar los agentes, se estima que los alimentos que se llevaron a los ladrones podrían llegar a tener un valor económico aproximado de unos 500 euros.