Muchas veces situaciones extremadamente inverosímiles se convierten en noticia por la intervención de la policía, los bomberos u otros cuerpos de seguridad. En esta ocasión un juego terminó de la peor manera posible.
Un simple juego de niños puede tener consecuencias muy negativas, por lo que es conveniente que siempre apliquemos el sentido común, porque la situación más estúpida puede irse de nuestras manos.
En la era de las redes sociales y las tecnologías digitales todo tipo de acciones divertidas, o no, pueden ser registradas y convertirse en virales. Es el caso del suceso que ha ocurrido en Australia.
El absurdo suceso
Los bomberos no podían creer lo que sucedía cuando recibieron la llamada para acudir a salvar a dos adolescentes que se habían quedado encajadas dentro de un carrito de la compra. Ocurrió en los aledaños del centro comercial Munno Para Shopping, en Australia
Cuando una de las chicas llamó a emergencias le preguntaron si se trataba de una broma, ella les comentó que no y les pidió que se dieran prisa, ya que ambas tenían miedo al no poder salir del carrito de la compra.
El centro comercial / Twitter
Una de las chicas explicó la situación a algunos medios locales: "Fuimos al parking a escuchar música, allí había algunos carritos. Así que pensamos que era une buena idea entrar en ellos y empujarnos", dijo.
A una de las chicas le daba miedo estar ella sola en un carrito y le pidió a su amiga que se montara con ella. Más tarde se dieron cuenta de que no podían salir y se asustaron.
Cuando los bomberos llegaron y se encontraron con esta estúpida situación se empezaron a reír al no creer lo que estaban viendo.
Seis bomberos llegaron para ayudarlas y se quedaron impresionados cuando se dieron cuenta de que no podían sacar a ninguna de las chicas usando la fuerza. Decidieron utilizar una amoladora angular para partir una parte del carrito y sacar a las adolescentes después de estar 15 minutos intentándolo.
Los peligros de la época de las redes sociales
En la era de las redes sociales es muy importante ser prudente, cualquier persona puede convertirse en un meme y ser humillado a través de una fotografía o video, por lo que conviene actuar con sentido común.
Con la globalización hasta un juego de niños que terminó mal como el que ocurrió en Australia puede hacer que te conozcan en todo el mundo en cuestión de horas.
Por suerte, no hubo que lamentar males mayores y, finalmente, gracias al trabajo de los bomberos todo quedó en un susto, pero seguro que estas chicas jamás vuelven a subirse en un carrito de la compra.