Cinco meses cerrada en una habitación de la cual no la dejaban salir ni siquiera para hacer sus necesidades. De esta situación ha sido liberada una mujer de 59 años de Salamanca después de pedir ayuda a un vecino a través de una ventana. La Policía Nacional pudo rescatarla después de detener a tres personas, dos hombres y una mujer, acusados de ser los responsables del cautiverio de la víctima para, según todos los indicios, poder quedarse con su pensión de 700 euros. Los tres han ingresado ya en la prisión de manera provisional, según lo ha decretado el magistrado del Juzgado de Instrucción en funciones de guardia de Salamanca.

Los agentes liberaron a la mujer el pasado 18 de diciembre. El vecino a quien había podido avisar de su situación llamó a los servicios de emergencias informando de que había una persona retenida contra su voluntad en uno de los pisos de su calle, y estos activaron una patrulla que pudo comunicarse con ella a través de esta misma ventana. Para poder sacarla tuvieron que necesitar la ayuda de los bomberos, que rompieron la puerta del domicilio al no abrir nadie cuando los policías se identificaron, así como la cerradura de la puerta de la habitación donde estaba la víctima.

Una habitación insalubre y con un cubo por hacer sus necesidades

La habitación que encontraron estaba en condiciones higiénicas deplorables. Los supuestos secuestradores no la dejaban ni tan solo ir al lavabo, y le habían dejado un cubo en un rincón para poder hacer sus necesidades. Una vez fuera de aquel piso, la mujer explicó que había sido secuestrada hacía cinco meses por una pareja y que en un principio podía salir a pasear con ellos. Con el tiempo, sin embargo, la dejaron encerrada en la habitación y era un amigo de ellos quien le llevaba la comida. La pensión que cobraba, de 700 euros al mes, se la quedaba íntegramente la pareja que la había secuestrado.

Los tres individuos descritos por la víctima fueron localizados y detenidos, acusados de un delito de detención ilegal. La mujer, por su parte, fue atendida por los servicios sanitarios que también acudieron al domicilio y que posteriormente la trasladaron al Hospital de Salamanca.