Las primeras pruebas practicadas al cadáver del bebé que este viernes encontraron muerto en Granada indican que la criatura había nacido pocas horas antes de su hallazgo. A primera vista no presenta signos de violencia, aunque será la autopsia la que determine las causas de la muerte. Una de las hipótesis de los investigadores es que pudiera morir de frío a causa de las bajas temperaturas de los últimos días.

El bebé acababa de nacer y fue abandonado con una manta

Hacia las once de la mañana, el cuerpo sin vida del bebé fue encontrado por una persona que andaba por un camino en una zona montañosa a las afueras de la ciudad, en la barriada de El Fargue. El bebé estaba envuelto con una manta y metido dentro de un agujero que alguien había cavado en un descampado al lado del camino. Rápidamente, alertó a los servicios de emergencia y hasta el lugar se desplazaron efectivos sanitarios y agentes de la Policía Local y la Policía Nacional.

A pesar de los esfuerzos que hizo por salvar la vida del bebé cuando llegaron, ya era demasiado tarde y solo pudieron decretar su muerte. La Policía Nacional se hizo cargo de la investigación y el cuerpo del bebé ha sido trasladado al Instituto Anatómico Forense para que se le practica la autopsia y le saquen muestras de ADN, que será clave para poder encontrar a los padres de la criatura y descubrir a los responsables de dejarlo abandonado a la intemperie al poco de nacer.

Tercer recién nacido abandonado y muerto en Granada

Desgraciadamente, la aparición de un bebé abandonado y muerto cuando acababa de nacer no es la primera vez que se vive en Granada. En el año 2018, trabajadores de una planta de residuos urbanos encontraron una bolsa de basura con el cadáver de una bebé que todavía tenía el cordón umbilical. De la misma manera, en el año 2008 también se encontró el cadáver de una bebé con el cordón umbilical en un contenedor de basura en la localidad de Santa Fe.