Raúl es el menor de 16 años que, presuntamente, ha asesinado a su madre a cuchilladas en Valladolid. Han salido a la luz las declaraciones del padre del adolescente, que asegura que nunca se ha comportado de manera violenta. Eva, la víctima, divorciada del padre del presunto asesino, había denunciado a su pareja actual por agredirla tanto a ella como a su hijo, que, casi un mes más tarde, la ha acabado matando.

Los hechos pasaron el jueves en un domicilio situado en la calle Siglo de Oro número 10 de Valladolid. La víctima se llamaba Eva María S.V., tenía 50 años, era del municipio de Cigales, estaba separada y hacía poco que se había mudado a la capital de la provincia.

El asesino de Valladolid confiesa el crimen a una amiga de Barcelona

Según la investigación policial, Raúl tuvo una fuerte discusión con su madre, cogió un cuchillo de cocina y la empezó a apuñalar y murió casi al acto. Después del crimen, llamó a una amiga suya de Barcelona y explicó que había matado a su madre.

Fue esta chica quien llamó a Emergencias y alertó del crimen. Los agentes de la Policía Nacional fueron hasta el lugar de los hechos y detuvieron a Raúl que, aunque se negó a abrir la puerta, no opuso resistencia durante el arresto y confesó el crimen. Actualmente, continúa en comisaría a la espera de pasar a disposición de Fiscalía de Menores.El padre del presunto asesino está denunciado por agresiones y delitos contra la propiedad

Según dice el padre del menor, el presunto asesino nunca lo había visto teniendo ningún comportamiento violento, explica el diario NIUS. También ha aprovechado la ocasión para comentar que él tampoco había sido violento con Eva, ya que la víctima mortal lo denunció el 6 de junio por agredirla tanto a ella como a Raúl. El presunto agresor, la pareja más reciente de la víctima, tiene antecedentes por delitos contra la propiedad.

Eva era víctima de violencia de género

Según explica el Diario de Valladolid, Eva era víctima de violencia de género por parte de su pareja y tenía una orden de alejamiento. De hecho, una semana antes del crimen, los servicios sociales se presentaron en el lugar de los hechos para comprobar el cumplimiento de esta medida cautelar.

Eva y Raúl eran poco conocidos en el barrio, ya que eran de Cigales y hacía menos de un año que vivían en este domicilio. Los vecinos del edificio explican que nunca habían tenido problemas con el menor y que, durante la tarde del jueves, no oyeron gritos ni nada que pudiera anteceder la tragedia, que está siendo investigada por la Policía Nacional.