Raphael, uno de los cantantes más icónicos de España, que este año cumplía sesenta años sobre los escenarios, no siempre tuvo tanto éxito. Así fue la vez que tuvo que cancelar un concierto tras recibir pedradas, tomatazos y huevos mientras actuaba.

Raphael y los Festivales de España de 1977

Fue en plena transición, cuando fue elegido como uno de los participantes en la campaña cultural conocida como Festivales de España.

Se trataba de actuaciones originadas en el periodo franquista, que eran organizadas por el Estado en distintos puntos del país y en los que actuaban distintos artistas y cómicos españoles.

Salir como uno de los seleccionados suponía entonces un gran hito, ya que garantizaba una temporada larga de trabajo que, en esa época, no era tan fácil.

Sin embargo, tras la muerte de Franco, cuando los festivales eran organizados por el gobierno, varios partidos políticos empezaron a oponerse al hecho de que en la nueva España democrática se contase con artistas vinculados a la dictadura.

Uno de los casos más sonados fue el de la cantante Lolita Sevilla en 1977, cuando protestó públicamente por haber sido eliminada de la contratación para el evento tras ser acusada de franquista.

Boicotean su concierto por defender la figura de Franco

La tragedia le llegó a Raphael en el marco de estos Festivales de España, en concreto en la edición de 1977, que se celebraba el 1 de septiembre en el Parque de los Mártires, actualmente de Abelardo Sánchez, de Albacete.

Sus precedentes le vinculaban con el franquismo por ser uno de los artistas preferidos de Carmen Polo de Franco, mujer del dictador, que había ido a varios de sus conciertos.

Ante las preguntas sobre su ideología, no se declaraba franquista, pero argumentaba que sí defendía la figura de Franco porque él era defensor "de quien lo haga bien para mi país".

Raphael en la actualidad / Europa Press

Raphael en la actualidad / Europa Press

Sin embargo, sus declaraciones no parecían convencer a varios sectores de la población y aquel concierto en la ciudad manchega acabó en drama. Con un gran impacto mediático, los camerinos de aquella edición se ubicaron en el colegio de San Fernando, donde empezó y acabó lo que los medios llamaron su "peor noche".

Su "peor noche": pedradas y tomatazos en plena actuación

Según algunos testigos consultados por elcierredigital.com, "personas cercanas al Partido Comunista decidieron boicotear la actuación de Raphael". El ataque no se hizo esperar, ya que a los quince minutos de empezar el concierto empezaron a volar los tomatazos hacia el escenario. La reacción del conocido como "El niño de Linares", fue contundente y enardeció aún más a las masas: "aquí confunden la democracia con la orgía".

Poco después llegaban los refuerzos que, en esta ocasión, respondían con la misma contundencia que había iniciado el artista: piedras y huevos fueron lanzados contra él, forzando que Raphael tuviese que abandonar el escenario y suspender la actuación durante más de treinta minutos mientras autoridades locales y los temidos "grises" -policía franquista- intentaban poner orden y cazar a los organizadores del boicot en el parque.

El alcalde de Albacete le convenció de que volviese al escenario

La estrella, enfadada, afirmó: "en quince años que llevo dando el callo por España es la primera vez que me arrepiento". Tal fue su reacción que tuvo que ser convencido por el propio alcalde de Albacete de entonces, Ramón Bello Bañón, para regresar al escenario 36 minutos después. Las luces se encendieron y se selló el episodio como "su peor noche".

Actualmente, ya lejos de estos episodios, el cantante sigue actuando por todo el país y de forma internacional, dejando atrás los tomatazos y sin parar de cantar tras sesenta años.