El Juzgado de Violencia sobre la Mujer número 1 de Pamplona ha decretado prisión provisional para los cuatro hombres acusados de haber violado a una chica durante una fiesta de universidad. Los implicados, hombres de 25, 26 y 33 años, de nacionalidad argelina, están acusados de agredir sexualmente a la víctima y después robarle sus objetos de valor. Después de valorar el riesgo de fuga de los cuatro detenidos, se ha decidido que ingresen en prisión de forma provisional, comunicada y sin fianza, ya que todos ellos están en situación irregular y no tienen domicilio, motivo por el cual la jueza considera que existe riesgo de fuga y, si se diera el caso, no tendrían dónde buscarlos.
Los hechos tuvieron lugar el pasado 23 de octubre, cuando se celebraba una fiesta de la Universidad Pública de Navarra (UPNA). Hacia las diez de la noche, cerca del estadio del Club Deportivo Amaya, la zona donde se celebraba la fiesta, varias personas encontraron a una chica que estaba "tirada en un camino, sobre unas hojas, desvalida, desubicada y semiinconsciente". Los jóvenes que la encontraron avisaron rápidamente a las autoridades para que se hicieran cargo de ella, que, al ver su estado y que había desaparecido su ropa interior, activaron el protocolo por las agresiones sexuales. La Policía Municipal de Pamplona la asistió y un médico forense atendió a la víctima e informó de varias lesiones.
Riesgo de salud
La policía investigó los hechos y estudió la zona, lo que les permitió identificar a los cuatro sospechosos acusados de haber violado a la chica y de haberla dejado tirada en el suelo, dejándola en unas condiciones físicas que, según ha declarado la jueza, podrían haber aumentado su riesgo de salud si no la hubieran encontrado rápidamente los jóvenes. Aparte de la ropa interior, también había desaparecido el bolso de mano, la cartera y el móvil, por lo que también se acusa a los detenidos de un hurto.
Para resolver las dudas, se han hecho análisis de ADN de los sospechosos, que lo han aceptado voluntariamente, confiando en que ayude a aclarar las posibles dudas sobre si realmente los cuatro acusados, que residían en tiendas de campaña ya retiradas, son los que han agredido a la víctima. También se ha revelado que, pese al poco tiempo que llevan en el país, uno de ellos ya tiene antecedentes por delitos de patrimonio.