Tres jóvenes mallorquines han sido condenados por la Audiencia de Palma a un año de prisión cada uno después de estafar 350.000 euros a Amazon, en la que es la mayor estafa que se le ha hecho nunca a esta compañía en Europa. Sin embargo, los tres acusados, dos hermanos de 22 años y un amigo suyo de la misma edad, no tendrán que entrar en ningún centro penitenciario después de llegar a un acuerdo con el ministerio fiscal. Los chicos han reconocido los hechos, han aceptado la pena impuesta y el pago de una multa de 1.080 euros. Eso se ha producido después de que en su momento ya abonaran parte de los 350.000 euros con cantidades en bitcoins embargados en el procedimiento antes de que la moneda virtual se desplomara. De hecho, al recibir esta indemnización solicitada, la misma Amazon se dio por satisfecha y salió del proceso judicial.
Estafaron 350.000 euros con falsas devoluciones
Las estafas se alargaron desde el año 2017 hasta el año 2019. Los tres jóvenes establecieron un método aprovechando la política de devolución inmediata de Amazon, con el cual estafaban a la empresa y a la vez ganaban dinero. Se dedicaban a ofrecer productos en páginas web de compraventa a un precio por debajo del habitual en el mercado. Cuando el comprador se los pagaba, ellos compraban el producto en Amazon, pero indicaban que lo enviaran directamente a la dirección del comprador. Este no sabía que realmente se lo enviaban de Amazon y que se estaban aprovechando de él como parte de la estafa. Primera parte del método completada.
En la segunda parte, los tres estafadores presentaban una reclamación a Amazon indicando que el producto había llegado en malas condiciones o que ya no lo querían. Por eso, solicitaban la devolución del dinero y ellos devolverían a enviar el paquete. Iban a una oficina de Correos y, con la etiqueta de envío generada por Amazon, retornaban las cajas vacías. Metían algunos objetos en el interior para simular el peso del producto y que pasara más desapercibido. Cuando se daban cuenta de la realidad, los jóvenes ya tenían de nuevo el dinero en su cuenta. Así, habían conseguido ganar dinero con la venta en una plataforma de compraventa y al mismo tiempo aquel producto lo habían conseguido gratis después de estafar a Amazon de forma fraudulenta. De esta forma llegaron a actuar hasta 200 veces, hasta que la multinacional los pilló y lo denunció a la Policía Nacional.