Nueva intervención de nivel en el puerto de Barcelona. La Guardia Civil y Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria han intervenido una partida de cocaína de 419 kilos de cocaína que se transportaban en un contenedor de café procedente de Costa Rica. El contenedor había sido seleccionado para su revisión por escáner de rayo X, un aparato que Vigilancia Aduanera tiene instalado en el puerto de Barcelona y que permite el control de este tipo de contenedores sin que se tengan que abrir o vaciar completamente.

De acuerdo con la información declarada, la carga legal eran 275 paquetes de unos 70 kilos de café, con un total de 19.000 kilos. Al pasar por el escáner, entre los primeros sacos de café y cerca de la puerta se apreciaron objetos sospechosos; eso obligó a hacer un control más detallado, llegando a encontrar los paquetes de cocaína que los narcotraficantes querían entrar a Catalunya por el mar.

Más de 8 M€ de cocaína

Cuando abrieron el contenedor encontraron 361 pastillas de cocaína retractiladas, con un peso de 419 kilogramos escondidas entre los paquetes de café que se habían declarado. La Policía Judicial de la Guardia Civil ha abierto una investigación para intentar averiguar quién había introducido la droga al contenedor en Costa Rica y quién tenía que descargarla para poder comercializarla. Se trata, esta intervención de la semana pasada, de una de gran valor, por la cantidad de la droga.

Aunque el puerto de la capital de Catalunya no es el punto de Europa donde más droga entra, cada vez son más las incautaciones que hace la policía. El precio de la cocaína, alertan a los expertos, está más bajo que nunca, por la saturación del mercado. Sin embargo, la droga intervenida por la Guardia Civil y Vigilancia Aduanera en el Prat puede superar los 8 millones de euros al mercado negro.

¿Qué es el 'gancho ciego'?

Esta modalidad de contrabando donde no se esconde la droga, sino que está visible se denomina 'gancho ciego'. Con esta modalidad, uno tercero que forma parte de la organización narcotraficante y que no está involucrado en el envío legal consigue llegar hasta el contenedor, introducir la droga y cerrarlo. Cuando llega a destino, otras personas lo abren y retiran la droga. Para que la operación sea rápida, se coloca la droga cerca de la puerta. A veces, la organización tiene el apoyo de operadores que tienen acceso a las zonas restringidas de los puertos para mover, cargar y descargar la mercancía de los contenedores, tal como ha explicado la Guardia Civil este lunes en una nota de prensa.