Los Mossos d'Esquadra han desarticulado un grupo especializado en robos a turistas en la AP-7 después de una peligrosa persecución por esta autopista hasta Tarragona. Los hechos tuvieron lugar el pasado sábado, cuando los Mossos recibieron el aviso que había unos ladrones cometiendo hurtos en áreas de descanso y estaciones de servicio. Lo hacían con el método conocido como asalto en movimiento, obligando a las víctimas a parar en su vehículo y esperar a que bajaran para sustraerles los objetos de valor. Normalmente, el conductor era quien hacía las maniobras para conseguir que se detuvieran, mientras los cómplices esperaban que salieran los ocupantes. Con respecto a las posibles víctimas, buscaban conductores de vehículos extranjeros y personas de edad avanzada.
Asalto frustrado a una familia con niños a Vilafranca
En uno de estos asaltos, incluso, habían generado sensación de angustia y peligro para la integridad física de una de las víctimas, que viajaba con sus hijos menores. Los hechos tuvieron lugar hacia las diez y media de la mañana cuando los ladrones abordaron el vehículo de la familia a la altura del kilómetro 195, a su paso por Vilafranca del Penedès, y lo hicieron parar en un área de descanso. Los ladrones, sin embargo, no se salieron con la suya y las víctimas, temiéndose lo peor, se negaron a abrir voluntariamente la puerta, a pesar de estar rodeados. Finalmente, los delincuentes acabaron desistiendo y se marcharon con las manos vacías, huyendo para la autopista a toda velocidad con la intención de buscar a otra gente a quien robar.
Una patrulla de agentes de Seguridad Ciudadana de la comisaría de Tarragona que hacía tareas de prevención de robos en las áreas de descanso de la AP-7, recibió información de cuatro desconocidos que iban a gran velocidad con un vehículo deportivo. Por los detalles obtenidos, se pudo comprobar que era un grupo especializado en robos en la autopista que había cometido varios hurtos, según alertaron algunos conductores con sus llamadas al 112. Al cabo de un rato, se pudo localizar el coche sospechoso y se inició una peligrosa persecución que acabó en la rotonda de salida de la autopista ubicada al kilómetro 246, a la altura de Tarragona. Durante la huida, el vehículo puso en peligro la seguridad del resto de usuarios de la autopista, que tuvieron que hacer maniobras para evitar tener un accidente.
Ya habían cometido otro robo días antes
Al registrar a los ladrones, se les encontró encima 300 euros y 330 dólares estadounidenses. Además, en el conductor también se le encontraron una navaja de grandes dimensiones y una defensa metálica extensible. Los cuatro, de entre 21 y 35 años y de quien los Mossos, en su habitual exceso de celo, no han querido facilitar la nacionalidad, quedaron detenidos por un delito de hurto. En el caso del conductor, también por un delito de conducción temeraria.
Se trata de multirreincidentes con más de un centenar de antecedentes policiales por robos, muchos de ellos en la misma AP-7. Solían utilizar coches de alquiler para dificultar la identificación, pero se da la circunstancia que el que llevaban en el momento de su detención ya se había visto implicado en el hurto a otro turista extranjero en el área de servicio del Penedès de la AP-7, en Sant Jaume dels Domenys, unos días antes, el 2 de julio.