Amplio despliegue policial esta madrugada en el Camp de Tarragona para atrapar a un ladrón que intentaba huir después de entrar a robar en las obras de reforma de la piscina municipal de Altafulla. El ladrón, poco después de las tres de la mañana, ha accedido al recinto rompiendo el candado de la puerta de acceso para llevarse parte del material. Un vigilante de seguridad, sin embargo, ha oído unos ruidos extraños y se ha acercado para ver que pasaba, momento en que ha sorprendido al asaltante llevándose el botín. El ladrón, al verse descubierto, ha salido corriendo hasta la furgoneta que tenía aparcada en el exterior y ha huido a toda velocidad.
Una peligrosa persecución hasta Tarragona
El vigilante de seguridad ha alertado del robo a la Policía Local de Altafulla, que rápidamente ha empezado la persecución del individuo con la colaboración de la Policía Local de Torredembarra y de los Mossos d'Esquadra, tal como ha adelantado el Diari de Tarragona. Los agentes policiales han establecido un control de carretera para intentarlo parar, pero el ladrón se lo ha saltado poniendo en riesgo a los policías. El fugitivo ha cogido la autovía A-7 en dirección a Tarragona, circulando de forma peligrosa, haciendo eses y cambios de carriles que han estado a punto de provocar algún accidente.
Finalmente, en una de las rotondas de acceso a la ciudad de Tarragona, a pocos metros del hospital Joan XXIII, se ha podido acabar la persecución. El fugitivo, que ya iba con la furgoneta muy dañada y una rueda pinchada, se ha visto sin escapatoria y rodeado por vehículos patrullas. El hombre, un vecino de Campclar de 51 años con múltiples antecedentes, ha acabado detenido por un delito de robo con fuerza y otro contra la seguridad vial. Al hacerle las pruebas de alcoholemia y drogas, ha dado positivo en el consumo de sustancias estupefacientes. Los Mossos d'Esquadra se han hecho cargo de la custodia del detenido hasta que sea puesto a disposición judicial, mientras que una grúa ha trasladado su furgoneta a las dependencias de la Guàrdia Urbana de Tarragona. En su interior, había material robado a la obra.