Varias personas graban una brutal pelea en el Port Olímpic de Barcelona, en el restaurante La Barca de Salamanca. Clientes y camareros se enzarzaron en una pelea por un cigarro, que acabó con vajilla y mobiliario roto, así como varios heridos.
Brutal pelea en el Port Olímpic de Barcelona
Los hechos tuvieron lugar este domingo en el restaurante La Barca de Salamanca, ubicado en la zona del Port Olímpic de Barcelona, una de las partes más turísticas de la ciudad. Según ha confirmado el medio La Vanguardia, el conflicto empezó cuando unos clientes del local encendieron cigarrillos en el interior. Los camareros les pidieron que los apagaran y todo se torció, ya que los fumadores respondieron de forma muy violenta.
Se inició una acalorada discusión que siguió escalando en agresividad: los clientes empezaron a lanzar platos y vasos de cristal por los aires, así como volcaron sillas. Los camareros intentaron echarlos, pero respondieron con golpes, desembocando en una especie de batalla campal entre trabajadores y clientes.
Camareros y clientes a golpes por un cigarro
Tras sacarlos del establecimiento, la pelea se recrudeció y los golpes fueron grabados desde el interior de un coche por una persona que publicó el vídeo en las redes sociales. En las imágenes, recogidas por el medio Barna Diario, se ve el interior del local destrozado y el resto de comensales levantándose asustados y comentando la situación.
Una vez fuera, se puede ver como se empiezan a pegar puñetazos y patadas, acabando uno de los clientes en el suelo, desde donde seguía insultando y dando golpes al aire. Tras levantarse se da un nuevo asalto y otro cae al suelo, recibiendo patadas y golpes de los trabajadores del restaurante, a los cuales se les acaba incluso manchando la camisa blanca de uniforme con sangre.
Parte de daños en La Barca de Salamanca
Finalmente, los camareros vuelven al establecimiento, donde los encargados ya habían avisado a la Guardia Urbana de Barcelona, que abrió un parte por daños a la propiedad, según el mismo medio.
No es la primera pelea producida en la capital catalana en los últimos meses. De hecho, estas semanas de verano se han producido varios altercados que también han incluido a agentes de los Mossos d'Esquadra y de la policía barcelonesa.
Disturbios en las fiestas mayores
Las fiestas mayores de localidades y barrios han acabado con disturbios. Este fue el caso de las celebraciones en el barrio de Sants de Barcelona, donde el pasado fin de semana se desalojaron al menos 25.000 personas y se detuvo a una persona por atentado contra agente de la autoridad. Porque en la actuación policial se lanzaron piedras y objetos contra los coches oficiales y los agentes, con un resultado de seis mossos heridos de carácter leve.
Guardia Urbana Barcelona en Sants / Europa Press
Algo similar ocurrió en La Seu d'Urgell, Lleida, donde las fiestas acabaron a golpe de porra. Un grupo de jóvenes que hacía botellón en la plaça del Carme de la localidad se enfrentó a los agentes de los Mossos d'Esquadra y acabaron recibiendo varios porrazos.
Después, unas 300 personas fueron desalojadas, aunque no sin esfuerzo, ya que los chicos que se encontraban en la calle se mostraron muy hostiles hacia la policía y llegaron incluso a atentar contra alguno de los mossos.