Sálvese quien pueda. Eso es lo que debió pensar un hombre que este pasado sábado abandonó el coche con las personas que lo acompañaban cuando la Policía Local de Martorell intentó pararlo. Los hechos pasaron de madrugada, en un momento en que agentes de servicio vieron un vehículo que estaba circulando sin llevar las luces encendidas y decidieron pararlo. El coche, sin embargo, optó por no hacerles caso y huir. Los efectivos policiales pudieron interceptar el vehículo, pero el conductor siguió con su intención de zafarse y arrancó a correr, dejando el coche allí parado con los ocupantes que había en el interior.
Los agentes policiales, aunque había personas dentro del vehículo, optaron por seguir al conductor. Otra patrulla que se encontraba por la zona lo pudo parar y lo identificó y registró. La primera de las sorpresas de los agentes fueron cuando le encontraron un puño americano y un cuchillo. Posteriormente, también se descubrió, como ya se podía sospechar por las armas que le encontraron en el cacheo, que tenía varios antecedentes. Además, también se comprobó que el permiso de conducir se le había retirado por pérdida de puntos.
Otro conductor borracho cogió el coche abandonado
Mientras los agentes identificaban y registraban al conductor, sin embargo, vieron cómo el vehículo que había dejado abandonado circulaba en dirección hacia ellos. En el volante había una persona que hacía unos minutos acababa de ser denunciada por consumir alcohol en la vía pública. Así pues, le practicaron las pruebas de alcoholemia, con un resultado final de 0,82 mg/l. Por este motivo, los agentes de la Policía Local de Martorell abrieron diligencias al juzgado de guardia por dos delitos contra la seguridad del tráfico, además de denunciar al primer conductor por tenencia de arma prohibida.