Las fiestas mayores de un municipio siempre son motivo de alegría: viene al pueblo la gente que vive fuera, todo el mundo se reúne y se disfruta de varias actividades en familia, como actos populares o conciertos. En la Bisbal d'Empordà (Girona), sin embargo, han vivido este año unas fiestas mayores que muy seguro querrán olvidar.
En los cinco días que duraron las celebraciones, del 14 al 18 de agosto, varias personas de edad avanzada fueron víctimas de tirones violentos. Por estos hechos los Mossos d'Esquadra han recibido hasta seis denuncias, y no descartan poder recibir más en los próximos días.
La Unidad de Investigación de la policía catalana, en colaboración con la Policía Local de la Bisbal d'Empordà abrió unas perquisiciones y gracias a las cámaras de seguridad que hay instaladas han podido identificar a dos jóvenes, uno de ellos, de veinte años, ha sido detenido. A estos dos individuos se les acusa de haber estirado una cadena y una pulsera a una mujer de 89 años mientras caminaba por las calles del casco antiguo de la ciudad con una amiga, de 88, en dirección a un concierto que formaba parte de uno de los actos de la fiesta mayor.
El ayuntamiento se personará como acusación popular
El concejal de Seguridad de la Bisbal d'Empordà, Xavier Dilmè, ha hecho unas declaraciones donde ha asegurado que estos actos han pasado durante la fiesta mayor del municipio, pero no acusa las celebraciones como motivo principal de esta oleada de robos, sino que como un "efecto mimético" con otras localidades próximas que ya han sufrido los mismos incidentes.
Dilmè ha asegurado que el Ayuntamiento de la Bisbal d'Empordà se personará como acusación popular a causa de "la alarma social que han generado estos robos a un colectivo tan vulnerable", y ha sido crítico con la Fiscalía, que "no pide prisión provisional para estas personas que, en su mayoría, son multirreincidentes".
La Unidad de Investigación de los Mossos d'Esquadra, por su parte, mantiene abierta la investigación y no descarta que pueda haber más detenidos.