Abdellah, el joven marroquí de 27 años que arrolló con un coche la terraza de un restaurante en la pedanía murciana de Roldán, se apuñaló a él mismo después del presunto ataque terrorista. Ahora, la aparición de unas cartas en las que aseguraba que se trataba de un ataque terrorista, ayudan a dilucidar cómo y por qué sucedieron los hechos.
Atropello masivo en una terraza de Murcia
El pasado viernes 17 de septiembre, un coche arrollaba la terraza de un restaurante indio en la avenida de Murcia de Roldán, una pedanía de la localidad murciana de Torre Pacheco.
A consecuencia del atropello, un hombre de 47 años, Oliver, de nacionalidad venezolana y comensal en el establecimiento, murió. También moría el conductor del vehículo, que, además, tenía heridas de arma blanca: había sido apuñalado.
Otras dos personas resultaron heridas y el suceso no dejó indiferente a nadie de esta pequeña comunidad. Además, varios vídeos e imágenes compartidos en las redes sociales lo convirtieron en un hecho de interés nacional.
Posible ataque terrorista
Instantes después, varias hipótesis se ponían sobre la mesa: una reyerta previa al incidente, un accidente, o un desequilibrio mental del conductor fueron las principales.
Pero hoy todo ha dado un giro, cuando la Audiencia Nacional ha empezado a investigar la tragedia como un posible ataque terrorista.
Pese a tener muy pocas víctimas y que ningún organismo islámico lo reivindicase, varias pistas han apuntado hacia un móvil de inspiración yihadista.
Lo más remarcable ha sido el resultado de la autopsia, que ha confirmado que las heridas de arma blanca se las había hecho a sí mismo el joven después de perpetrar el presunto atentado. De hecho, el arma se encontró dentro del coche.
Se apuñaló a él mismo después del atropello
A lo largo del día de hoy, sin embargo, otros detalles refuerzan la hipótesis. Tal y como informa el medio Nius, Abdellah también dejó varias cartas escritas antes de matarse, en las que aseguraba que lo que pretendía llevar a cabo era una acción terrorista.
Además, un testigo declaró que había podido verle rezando después de la colisión y precisó que había realizado el Tawhid: una señal de los yihadistas de Estado Islámico que consiste en levantar el dedo índice de la mano derecha hacia el cielo.
El gesto simboliza "la proclamación del Único", la llamada Unicidad de Alá, que señala el convencimiento de que no hay más dios que el suyo.
Cartas proclamando una acción terrorista
El mismo día del atropello mortal, el mismo propietario del bar aseguraba que el joven había estado dando vueltas con el coche por las inmediaciones de Torre Pacheco hasta que llegó a la avenida de Murcia.
Fue en esta vía en la que entró circulando a más de 120 kilómetros por hora para arrasar la terraza del restaurante y estamparse contra la fachada de una vivienda.
Según el medio citado, Abdellah, de nacionalidad marroquí, llegó a España cuando solo tenía 13 años. Pasó cinco años, hasta que cumplió la mayoría de edad, en un centro de menores no acompañados de Valencia.
Y hace tres años se mudó a la localidad murciana de Torre Pacheco con su hermano Bendaoud. Ahora, a los 27, ha sido el presunto terrorista que ha matado a una persona y a él mismo en la pedanía de Roldán.
"Víctima del sistema"
Mientras la investigación continúa, el juez Alejandro Abascal deberá determinar si se trata efectivamente de una acción terrorista llevada a cabo por un lobo solitario o si el joven tenía algún desequilibrio mental.
En una de las cartas encontradas, aseguraba que había sido víctima del sistema y de agresiones mentales. Los investigadores de la Guardia Civil ya han registrado su domicilio y ahora analizan su material informático para buscar posibles vínculos con el yihadismo, mientras se ha decretado el secreto de sumario.