Equipos científicos alertan de un virus más letal que la Covid-19 que podría originar una nueva pandemia.

Afecta al sistema respiratorio y al cerebro y no tiene cura. Además, su tasa de mortalidad puede llegar al 75%.

Podría provocar una nueva pandemia

El Nipah es un virus que proviene también de un murciélago.

Ha sido el equipo de Supaporn Wacharapluesadee, jefa del centro de Investigación de Enfermedades Infecciosas Emergentes de la Cruz Roja de Tailandia, los que alertan de la proximidad de este virus.

Wacharapluesadee es especialista en virus y hace años que forma parte del proyecto Predict, una asociación internacional que busca detectar y frenar enfermedades que pueden pasar de animales a humanos.

El virus Nipah también tiene su origen en un murciélago y se transmite a los humanos a través de la comida y del contacto directo / Pixabay

Su equipo, pionero en la investigación vírica, alerta ahora de la necesidad de ser conscientes de que a esta pandemia le pueden seguir otras provocadas también por virus. 

Un virus más mortal que la Covid-19

En el caso de Nipah, la alarma la crea su alta tasa de mortalidad: de entre el 40% y 75%. También el hecho de que, de momento, no tenga vacuna.

Es un virus que se halla en los murciélagos que comen fruta -especie a la que también se le atribuye el origen del ébola y de la Covid-19- y que provoca tos, dolor de garganta, dificultades respiratorias y encefalitis, una inflamación del cerebro que puede causar convulsiones y la muerte.

Es por eso que la Organización Mundial de la Salud la coloca entre las diez primeras enfermedades con potencial riesgo de pandemia -junto al ébola y la Covid- y que insiste en investigarla y evitar su propagación.

Por su contagio rápido en el proceso de incubación, la Organización Mundial de la Salud sitúa el Nipah entre las diez enfermedades prioritarias para investigar y desarrollar / ACN

Y ¿cómo se transmite de un murciélago a un humano? Pues, según el estudio de los diferentes brotes que ha habido en Camboya y La India, la infección se puede producir de varias formas.

Primero, comiendo un alimento contaminado previamente por los murciélagos u otro animal afectado -es un virus que se contagia en una gran variedad de animales-.

Este factor de contagio se demostró con la fruta vendida en mercados callejeros de Battambong, al noroeste de Camboya, sobre la que caían heces y orines de los murciélagos.

Una de las mayores vías de contagio es comer alimentos contaminados previamente por animales infectados. En numerosos mercados callejeros de Camboya, las heces y orines de los murciélagos caían sobre la fruta / Pixabay

También se dio a través de la leche de palmera datilera, que se consumía en pequeñas comunidades de Camboya y que había sido infectada por los animales.

Segundo, entrando en contacto directo con los animales infectados a través de sus heces o secreciones corporales.

Y por último, la transmisión de persona a persona, que también se ha dado y se investiga para calcular la tasa de contagio.

Nipah, muchos días de incubación y de contagio

El mayor riesgo de contagio que preocupa a los investigadores es el proceso de incubación. El virus Nipah puede tardar hasta 45 días en provocar síntomas.

Por lo tanto, las personas que lo tengan en periodo de incubación y que no sepan que lo tienen podrán contagiar a muchas otras hasta que la enfermedad se manifieste.

La comunidad científica tailandesa es pionera en la detección de los virus asiáticos.

Asia es el continente que aglutina al 60% de la población mundial y que cuenta con una gran biodiversidad en la que se generan muchísimos patógenos que pueden llegar a los humanos.

La pérdida del hábitat natural de los murciélagos en las junglas asiáticas han provocado grandes migraciones de estos animales a zonas urbanas, donde entran en contacto con humanos / Pixabay

La deforestación de bosques, que eran el hábitat natural de los animales portadores de estas infecciones, ha provocado la migración de murciélagos a zonas urbanas, poniéndolos en contacto con los humanos, hecho que en su estado normal no se produciría.

El equipo de Supaporn Wacharapluesadee detectó antes de la epidemia global de la Covid-19 el virus en su país, investigándolo y reduciendo el impacto que tuvo en su población.

En Tailandia, de sus más de 60 millones de habitantes, este enero de 2021, registraron tan solo 8,955 casos y 65 muertes, según informa BBC.