Sara entró en quirófano por una lipoescultura en Murcia y, después de estar un mes en la UCI con un pronóstico muy grave, ha acabado muriendo por culpa de esta cirugía estética. Su familia ha pedido que se investigue al médico como responsable de los hechos.
Sara era de Alcantarilla y tenía dos hijos
Sara es una mujer de 39 años de Alcantarilla (Murcia) que ha muerto después de hacerse una cirugía estética. Era una mujer sana, madre de dos hijos y trabajadora de una importante inmobiliaria.
Sara Gómez Sánchez ha muerto un más después de hacerse una lipoescultura
Sara Gómez Sánchez era una aficionada al mundo de la belleza y decidió hacerse una operación para reducir la grasa de la barriga y marcar los abdominales, una cirugía que se denomina lipoescultura. Sara es una aficionada del deporte y prácticamente no tenía grasa en la barriga, no tenía mucho sentido hacerse esta operación, pero, así y todo, el médico se la hizo.
Ingresada en la UCI del hospital Virgen de la Caridad de Cartagena con un pronóstico muy grave
Esta operación es muy cara y cuesta, aproximadamente, unos 13.000 euros, pero este cirujano ni le cobró ni 6.000, unos hechos que hacen saltar las alarmas. Lo que tenía que ser una operación sencilla se acabó convirtiendo en un infierno: las horas iban pasando y no salía de quirófano y, finalmente, vino una ambulancia y se la llevó al hospital Virgen de la Caridad de Cartagena donde fue ingresada con un pronóstico muy grave.
"De esta no salgo viva. He oído que me han perforado todos los órganos y he visto la sangre"
"De esta no salgo viva. He oído que me han perforado todos los órganos y he visto la sangre", dijo Sara cuándo ingresó en la UCI. Por causas que todavía se están investigando, el médico, presuntamente, le perforó 27 órganos, un hecho que provocó su muerte casi un mes después.
Acusado de negligencia médica o de homicidio imprudente
Los familiares de Sara están esperando los resultados de la autopsia para averiguar las causas de su muerte y, en función de los resultados, acusarán al doctor de homicidio. No solo han pedido que se investigue al cirujano, también han pedido que se investigue a todas las personas que, de manera más o menos directa, también hayan participado en la operación.
Piensan que la ha operado mientras iba drogado y piden que lo investiguen
Piensan que el cirujano podría haberla operado bajo el consumo de drogas y, por este mismo motivo, han pedido que le cojan muestras para desbriznarlo. El médico se podría enfrentar a penas de prisión y a sanciones económicas muy elevadas acusado de un homicidio imprudente por una negligencia médica.