Un niño de 10 años muere en extrañas circunstancias en una escuela de Albacete. Durante más de dos horas lo han intentado reanimar, pero desgraciadamente ha acabado muriendo, unos hechos que han causado gran conmoción en Castilla-La Mancha. De momento, se desconocen las causas de la muerte y habrá que esperar a saber los resultados de la autopsia.
Los hechos han pasado este martes por la mañana en la escuela Mari Llanos Martínez de Albacete. Todo ha empezado cuando Emergencias 112 de Castilla-La Mancha ha recibido una llamada, a las 9:10: los alertaban de que había un niño menor de edad inconsciente en este centro educativo.
Los sanitarios intentan reanimar al niño de 10 años durante más de dos horas
Hasta el lugar de los hechos, se ha desplazado una ambulancia y una UVI con el médico de urgencias y, durante dos horas, han intentado reanimar al niño. Desgraciadamente, no han podido hacer nada para salvarle la vida y ha acabado muriendo en las 11:00. También se han desplazado efectivos de la Policía Nacional y de la Policía Local albaceteña
Se desconocen las causas de la muerte del menor de Albacete
De momento, se desconocen las causas de su muerte. Habrá que esperar a saber los resultados de la autopsia, que determinarán si ha sufrido un accidente o si ha sido una muerte natural. Los hechos han causado gran conmoción en Albacete y los profesores y alumnos todavía no dan crédito a la situación, que ha dejado a todo el mundo consternado.
"Quiero estar con sus padres, con su familia, con la comunidad educativa, con el personal sanitario que lo ha atendido y con el mismo centro escolar", explica Emiliano García-Page, el presidente de Castilla-La Mancha.
Un niño de 10 años muere en extrañas circunstancias en una escuela de Albacete: de momento se desconocen las causas de su muerte y habrá que esperar a saber los resultados de la autopsia / EFE
Unos padres ingresan en la prisión de manera provisional por la muerte de su hijo de tres meses
Este no es el único menor muerto en extrañas circunstancias en los últimos días. En Artesa de Segre (Lleida), un bebé de tres meses también murió. En este caso, a diferencia del niño albaceteño, su cuerpo tenía indicios de haber sufrido una muerte criminal.
Según explican fuentes del caso en el diario Segre, el cuerpo del pequeño presenta signos de maltrato "difíciles de justificar" y que entran en contradicción con las declaraciones de los padres, que aseguran que no tienen nada que ver con los hechos. Actualmente, están ingresados en la prisión. En caso de que se demostrara su culpabilidad, se podrían enfrentar a la máxima pena posible: la prisión permanente revisable.