Los Mossos d'Esquadra han desmantelado un cultivo de marihuana con centenares de plantas ocultas en medio de un bosque en Fígols i Alinyà, en el Alt Urgell (Lleida), y ha detenido a seis personas de entre 23 y 33 años como presuntos responsables de la plantación. El operativo que ha permitido acabar con la producción de esta droga en medio de la naturaleza se inició el pasado 8 de agosto, cuando la policía catalana detectó la existencia de esta plantación en medio de una zona montañosa. Se empezó a inspeccionar la zona intentando no ser detectados y se hicieron vigilancias aéreas con drones que permitieron confirmar que el cultivo estaba en una zona aislada de difícil acceso a la cual solo se podía llegar a pie.
Más de 1.300 plantas y un campamento para quedarse a vivir
La inspección por parte de los Mossos d'Esquadra permitieron determinar que los responsables de la plantación, en una zona diferenciada de donde estaba el cultivo, habían montado un campamento con cocina, comedor y tiendas de campaña para poder dormir para que los cuidadores se pudieran quedar a vivir y pudieran hacer vida cotidiana. Al comprobar que el momento óptimo de recolección estaba próximo en el tiempo, se decidió agilizar el operativo y se solicitó la autorización judicial pertinente para poder intervenir.
Así pues, una vez recibido el visto bueno del juez, el pasado 13 de agosto se procedió al desmantelamiento de la plantación con efectivos de la Unidad de Investigación y de la Unidad de Seguridad Ciudadana de la Seu d'Urgell, así como del Área Regional de Recursos Operativos (ARRO). Los agentes pudieron decomisar 1.369 plantas a punto de recolectar, las cuales se destruyeron in situ, y 76,5 kilos de cogollos de marihuana ya secados. Las seis personas que había en el lugar fueron detenidas y pasaron el día siguiente a disposición judicial en la Seu d'Urgell acusados de un delito contra la salud pública y pertenencia a grupo criminal.