Un hombre de 39 años y nacionalidad española ha muerto apuñalado por su casero esta pasada madrugada en una vivienda en la pedanía de Altet, en Elche. Hacia las tres de la mañana, la víctima, gravemente herida y perdiendo abundante sangre, ha llegado arrastrándose por la calle hasta una gasolinera para intentar pedir ayuda. Los trabajadores de la estación de servicio han alertado rápidamente a los servicios de emergencia, pero cuando los sanitarios han llegado ya era demasiado tarde y el hombre había muerto. El cadáver presentaba tres cuchilladas, una de ellas directamente en el corazón, lo que hubiera hecho inútiles igualmente las maniobras de reanimación.

El rastro de sangre delata al asesino

Una patrulla de la Policía Local que se encontraba en los alrededores de la gasolinera ha empezado a seguir el rastro de sangre que la víctima ha ido dejando por la calle. Así, han llegado hasta una calle donde han visto a un hombre en actitud sospechosa que parecía que intentaba huir corriendo. Los policías lo han parado y le han pedido que se identificara, acabando deteniéndolo como presunto autor del apuñalamiento mortal.

La Policía Nacional ha abierto una investigación sobre el crimen para aclarar que ha pasado y qué motivación tenía el presunto asesino. Efectivos de la Policía Científica se han desplazado hasta el piso donde se ha producido el apuñalamiento, en la calle Balandre, para recoger pruebas e indicios que ayuden a aclarar la investigación. El cuerpo ha sido trasladado al Instituto Anatómico Forense de Alicante para que se le practique la autopsia. Teniendo en cuenta el lugar donde ha recibido las cuchilladas, los investigadores creen que el objetivo del asesino, de 41 años y nacionalidad colombiana, era matarlo. El juzgado de guardia de Elche se ha hecho cargo del caso y ha decretado el secreto de actuaciones. La hipótesis es que la víctima discutió con el agresor porque no le había pagado las cuotas del alquiler y terminado le apuñaló mortalmente.