Los Mossos d'Esquadra han detenido este martes 4 de junio a un hombre de 56 años en l'Aldea, acusado de conducción temeraria, conducir bajo los efectos del alcohol y negativa a someterse a las pruebas de detección alcohólica. Se trata de un conductor profesional, de nacionalidad extranjera y sin domicilio conocido en el Estado español. Condujo, completamente borracho, haciendo movimientos erráticos y poniendo en peligro a todos los conductores de la AP-7 y la A-7 durante más de 60 kilómetros.

 

Diversas llamadas al teléfono de emergencias 112, alrededor de las dos y media de la tarde, alertaron que un camión con matrícula extranjera circulaba de manera peligrosa por la autovía A-7, poniendo en riesgo la seguridad de los otros usuarios de la vía. Los testigos localizaron el camión en el tramo entre Cambrils y l'Hospitalet de l'Infant, en sentido sur. El vehículo accedió a la autopista AP-7, continuando su marcha en dirección al País Valencià. Dos policías fuera de servicio, que se encontraban en la misma vía, observaron los hechos y se situaron detrás del camión con sus vehículos particulares para retener el tráfico y evitar accidentes, haciendo uso de los intermitentes e indicaciones a los conductores de la vía.

Se negó a soplar

Después de más de 60 kilómetros, entre Cambrils y l'Aldea, el camión pudo ser detenido con seguridad por patrullas de los Mossos d'Esquadra. El conductor, que presentaba síntomas evidentes de embriaguez, se negó repetidamente a someterse a las pruebas de alcoholemia, a pesar de ser informado de las consecuencias penales de su negativa. El hombre, que no tiene domicilio conocido en el Estado español, fue detenido y pasó a disposición del juzgado de instrucción de guardia de Tortosa al día siguiente, quedando en libertad. Está acusado de los delitos de conducción temeraria, conducir bajo los efectos del alcohol y negativa a someterse a las pruebas de detección alcohólica.