Continúa bajo secreto de sumario el caso del asesinato de Marta, una mujer española de 44 años y vecina de Segur de Calafell. Su pareja, un hombre de la misma edad y también de nacionalidad española, ha ingresado en prisión, acusado de asesinato, mientras los Mossos d'Esquadra continúan investigando los hechos para aclarar qué ocurrió. Aunque no había antecedentes judiciales de violencia entre la pareja, sí se ha sabido que la mujer había presentado una denuncia en Onda, en Castelló, contra quien después se convertiría en su verdugo.

El hombre se entregó a los Mossos el pasado Viernes Santo, hacia las siete de la tarde, cuando se detuvo con el coche en un área de servicio de la AP-7, a la altura de Constantí. Al ver una patrulla de la policía catalana, se acercó, bajó del vehículo —donde viajaba solo— y explicó que llevaba el cuerpo de una mujer en el maletero. El cadáver de Marta presentaba signos de violencia, y el hombre fue detenido de inmediato. La Divisió d’Investigació Criminal (DIC) de los Mossos en la región de Tarragona se hizo cargo del caso. Según declaró el hombre, la habría matado en Castelló, pero la investigación aún no ha podido determinar el lugar exacto del crimen. Algunas fuentes apuntan a que podría haber sido en el domicilio donde vivían, en una urbanización de Segur de Calafell. Parece que la pareja había pasado unos días en Onda, de donde era originaria la víctima, pero que ya habían regresado a Catalunya.

Miedo a represalias de la familia

La policía sospecha que el hombre, atemorizado por la posible reacción de la familia de la mujer —que, como él, era de etnia gitana—, decidió entregarse para evitar represalias. En cualquier caso, la investigación tendrá que aclarar todos los detalles de este nuevo crimen machista, el segundo de este año en nuestro país. Por el momento, el hombre se encuentra en prisión.

La pareja vivía en la parte alta de Segur, según ha podido saber ElCaso.com, y la víctima tenía una hija menor de edad de una relación anterior. La policía no descarta que el hombre hubiera matado a la mujer por venganza, motivado por una posible infidelidad, aunque este extremo aún no se ha confirmado. También se cree que habría intentado deshacerse del cuerpo, pero que durante la huida se lo habría pensado mejor y finalmente se habría entregado a los Mossos en Constantí, para evitar ser atrapado antes por los familiares de Marta, que sabían que ella lo había denunciado por maltrato machista en Castelló.

En prisión

Este lunes al mediodía, tras pasar a disposición del juzgado de guardia de Tarragona, el hombre ingresó en prisión. El juez considera que la causa debe continuar como posible asesinato y ha ordenado prisión provisional, comunicada y sin fianza para el presunto verdugo de Marta. El caso pasará ahora al juzgado de El Vendrell, ya que se cree, de momento, que el crimen se cometió en el Baix Penedès, aunque el hombre inicialmente había dado otra versión. En cualquier caso, era allí donde vivían, pese a los vínculos familiares con la zona de Castelló. Un centenar de personas se concentraron este Domingo de Resurrección en Calafell para hacer un minuto de silencio y condenar el feminicidio. La consellera de Igualtat i Feminismes de la Generalitat, Eva Menor, afirmó que la lacra de la violencia machista “debería avergonzar” a la sociedad, e insistió en que el Govern seguirá trabajando para ofrecer una respuesta a las víctimas en términos de atención, recuperación y reparación.