El conductor que causó el choque mortal en Gurb (Barcelona) en marzo de 2018 se sienta en el banquillo. El juicio continúa tras la declaración de los Mossos d'Esquadra y el principal acusado de provocar el accidente en el que murió Meritxell, una joven de 17 años, ha declarado que "no veía riesgo" en conducir durante seis minutos a 145 kilómetros por hora contra dirección por la C-17. Marc, de 47 años, ha relatado que su cerebro "no era capaz de funcionar ni de razonar" después de tomarse "más de cinco copas y tres rayas de cocaína". Esta es la explicación dada este jueves ante el jurado popular en la Audiencia de Barcelona, mientras la Fiscalía mantiene la solicitud de una pena de trece años de prisión.
Tomó cocaína en una discoteca antes de hacer el "kamikaze" por la C-17
Marc ha remarcado que como consecuencia de esos estupefacientes en una discoteca con un amigo, cuando cogió el coche para irse a su casa, no se dio cuenta de que se incorporó a la C-17 en sentido contrario, pese a que circulaba por ahí "habitualmente" y "no vio el riesgo" de ir a 145 kilómetros por hora. Además de ir sin el cinturón de seguridad, ha detallado que pasaron unos 35 minutos desde que se tomó la última raya de cocaína en la discoteca y se subió al coche. En la declaración de que "no era capaz de funcionar ni de razonar", ha hecho referencia al hecho de ver las señales de la carretera y todas las indicaciones al revés. Por otro lado, cuando pasó a escasos cinco centímetros de un coche de policía que le intentó dar el alto, ha asegurado que no recuerda nada.
De hecho, en este último punto, ha aseverado que en esos seis minutos, unos diez kilómetros, que condujo a toda velocidad y contra dirección por la carretera C-17, se asustó en el momento que vio el primer coche de cara. Según su declaración, entró en pánico. Algo que contradice el hecho de que la policía intentara que parase y, así lo ha recordado la Fiscalía, siguiera circulando tras sortear y pasar "a cinco centímetros" de un coche patrulla.
Esto es lo que pasó en el accidente mortal de Gurb en 2018
Como ya se ha dicho, Marc está acusado de provocar un choque mortal en Gurb tras conducir contra dirección e ir bajo los efectos del alcohol. Los hechos tuvieron lugar a la altura del kilómetro 64,3 del municipio barcelonés, cuando chocó con su Peugeot contra un Jaguar en el que viajaban cuatro personas, entre ellos la joven de 17 años que murió prácticamente en el acto, Meritxell. La menor sufrió un traumatismo torácico-abdominal, que le provocó una hemorragia masiva y poco después perdió la vida.
Los otros tres ocupantes del vehículo fueron evacuados por los Bombers de la Generalitat y trasladados a distintos centros hospitalarios con heridas. Marc, tras el accidente, dio positivo en alcohol con una tasa de 0,62 miligramos por litro de aire espirado, lo que supone más del doble de lo permitido, y dio positivo en cocaína. El acusado se enfrenta a una pena de 13 años de prisión, solicitada por la Fiscalía, por conducción bajo los efectos del alcohol, homicidio imprudente y lesiones por imprudencia. También reclama una indemnización de unos 350.000 euros para los padres y la hermana de Meritxell.