"Mama, te amo, voy a morir". De esta desgarradora manera una de las víctimas mortales del incendio que ha matado a 13 personas en una discoteca de Murcia se despedía de su madre poco antes de morir. Así lo ha explicado en Jairo, su padre, en las puertas del Palau d'Esports de Murcia, el espacio que el ayuntamiento ha habilitado para dar el apoyo y asistencia a los familiares de los difuntos. "Es mi hija y no he vuelto a saber nada de ellos. Tampoco de su pareja", dice. La joven, de 28 años y nacionalidad ecuatoriana, había ido con su novio desde Caravaca de la Cruz, donde viven, hasta Murcia para pasar la noche de fiesta con unos amigos.

Los jóvenes se tenían que desplazar hasta la capital porque en su pueblo "no hay discotecas". Lo hicieron en el coche "de un amigo que no bebe", pero este todavía seguía aparcado en las puertas del local después de la tragedia. El padre, totalmente desconsolado, ha explicado a los medios de comunicación que, justo en el momento de los hechos, "ha enviado un audio a su madre explicando qué pasaba y despidiéndose. Se oían gritos sin respiración y gente gritando que encendieran la luz", ha explicado totalmente desconsolado, justo antes de poner el conmovedor audio. Según ha explicado, después de eso ni ella ni ninguno de sus amigos se ha puesto en contacto con sus familiares.

 

El incendio ha dejado trece muertos

A estas alturas, la Policía Nacional ha confirmado que hay trece víctimas mortales, aunque no se descarta que el número pueda aumentar en las próximas horas, ya que todavía podrían quedar más cuerpos entre los escombros del edificio, en que se ha derrumbado por las llamas. De momento, los servicios de emergencias siguen trabajando en la zona. Según datos oficiales, hay una lista de catorce personas desaparecidas, a pesar de que puede haber en ella algunas de las víctimas mortales que todavía no han sido identificadas. Las autoridades han pedido a los familiares que aporten restos de ADN para poder ayudar en la identificación.