La Policía Nacional ha detenido en València a una mujer de 44 años que había planeado el asesinato de su expareja y, al ver que este había fracasado, también el de las hijas que tenían en común. Según han informado desde el cuerpo policial, la detenida encargó a una amiga suya que buscara a un sicario para poner fin a la vida de su expareja. Al ver que eran muy caros y no podía pagarlos, ofreció a la misma amiga que fuera ella quien asesinara al hombre a cambio de 700 euros. El plan inicial era conseguir alguna droga o veneno a través de internet con la cual dormir a la expareja. Incluso, habían previsto probarla antes con un animal para saber si daba resultado. Una vez estuviera dormido, la amiga lo mataría con algún arma blanca que llevaría.

Así pues, el día acordado, la amiga se presentó en el lugar de trabajo del objetivo antes de acabar su jornada laboral, sabiendo que en aquel momento estaba solo. Iba cargada con una mochila con un martillo, un cuchillo y con la sustancia estupefaciente. No obstante, después de saludarlo, empezaron a hablar y la mujer fue cambiando de idea poco a poco. Después de tres horas de conversación, se arrepintió porque "parecía buena persona" y "no se lo merecía".

La mujer tenía un plano B preparado por si fracasaba el asesinato de su expareja

Al ver que el plan para asesinar a su expareja había fracasado, la inductora de los hechos decidió llevar a cabo un plano B que había tramado por si las cosas salían mal. Este consistía en matar a las hijas menores que tenía en común con el hombre y, posteriormente, suicidarse con el objetivo de hacerle al padre todo el daño psicológico posibles. No obstante, cuando la amiga a quien había ofrecido 700 euros para cometer el asesinato se enteró, decidió confesarlo todo al hombre, que rápidamente lo denunció a la policía. Tanto la mujer que lo había planeado todo como la amiga que la delató fueron detenidas. Las dos, con antecedentes policiales, ya han sido puestas a disposición judicial.