Una semana después de la investigación contra el top manta que avanzó ElCaso.com, hoy los Mossos d'Esquadra, en una nota de prensa, han dado nuevos detalles del entramado que, según los investigadores de la policía catalana, controla la venta de productos falsificados en la Costa Daurada que importan desde China. Se detuvo a una veintena de personas, la mayoría de nacionalidad senegalesa u originarios de Senegal pero nacionalizados españoles, y todas quedaron en libertad tras ser entregadas, junto con todas las pruebas recogidas por los Mossos y la Policía Nacional, al juzgado 3 de Tarragona, que no dictó ninguna medida cautelar, aunque mantiene la causa abierta por un delito contra la propiedad intelectual y también por organización criminal.
Según los Mossos, se intervinieron más de 23 toneladas de prendas de ropa que vulneraban los derechos de propiedad industrial de marcas reconocidas y también relojes supuestamente falsos. Algunos productos que quedaron confiscados, sin embargo, aún no se habían manipulado y todavía no llevaban las marcas que querían imitar. En cualquier caso, la policía catalana asegura que, en los almacenes registrados en Salou, Reus y les Borges del Camp, se intervino material por valor de 5.630.000 euros en el mercado negro y se calcula que las marcas habrían dejado de ingresar más de 25.000.000 de euros. Ahora es trabajo de los instructores probarlo durante el juicio, que no será fácil, viendo el primer revés judicial: dejar en libertad a todos los integrantes de la supuesta organización criminal, también al que los Mossos han acreditado que era el líder de la banda y que mantenía un rol de organizador y que nunca salía a la calle a estirar la manta. El golpe contra la venta ambulante ilegal en la Costa Daurada de la semana pasada es el más importante realizado hasta ahora, por el número de detenidos y también por haber descabezado —aunque han quedado en libertad— la parte alta de la organización criminal que importa, modifica y pone en circulación la ropa falsificada.
Meses de investigación para saber de dónde salía la ropa
Durante los meses de investigación, que se han alargado casi un año, los Mossos identificaron un grupo de personas establecidas en la Costa Daurada que se dedicaban masivamente a la importación desde China de toneladas de ropa y complementos falsificados para distribuir y vender en zonas turísticas, intensificándose con la llegada del turismo de verano. Los productos falsificados incluían camisetas deportivas de selecciones y equipos de fútbol, zapatillas deportivas, bolsos y relojes de lujo con certificados de autenticidad y garantías también falsificados. Durante el transcurso de la investigación se identificaron lugares de almacenamiento, muchos de ellos espacios amplios y de fácil acceso, incluyendo vehículos particulares estacionados en la vía pública, que también fueron registrados la semana pasada, en el operativo policial que también desencadenó graves desórdenes públicos, con ataques a la policía y tres agentes de los Mossos heridos.

Según los Mossos, la estructura de este mayorista del top manta de Salou estaba organizada en tres niveles. En el primero, estaba el jefe de la organización, quien dirigía la actividad, disponía de una flota de vehículos para trasladar el material y también a los miembros del grupo. También gestionaba los almacenes para guardar el material y disponía de la maquinaria para acabar la producción de los objetos falsificados. En un segundo nivel había tres hombres que realizaban la distribución del material a los vendedores finales. Para hacerlo, disponían de vehículos para ir de los almacenes a los puntos de venta. En este segundo nivel también se encargaban de captar nuevos vendedores. También se han detenido a algunos de los integrantes del tercer escalón, que, además de vender, estos sí, ya en la calle, también actuaban como representantes de la organización y también guardaban, en los pisos donde vivían, material para la venta final, bajo la supervisión, supuesta, del jefe del entramado criminal.
Almacenes en Salou
En Salou se registraron tres domicilios, tres almacenes —el alcalde de Salou, Pere Granados, crítico con el operativo policial, asegura que no hay almacenes en su ciudad— y cuatro vehículos; en Reus, dos almacenes; y en les Borges del Camp, también en el Baix Camp, otro almacén, aquí con una plantación de marihuana con 5.100 esquejes, para diversificar el negocio. Entre el material intervenido por los Mossos en este golpe contra el top manta también se ha confiscado material para personalizar productos genéricos y adhesivos para estampar en la ropa para convertirla en material de marcas reconocidas y poderla poner a la venta. Con las 23 toneladas de material supuestamente falsificado —más el que aún no se había manipulado— y el material para hacerlo fuera de circulación, fuentes policiales aseguran que el golpe contra esta organización ha sido duro, aunque este fin de semana los manteros volvían a estar en las zonas habituales de venta, a pesar del aumento de presencia policial en la zona.