El joven de 20 años que denunció este septiembre haber sido agredido por un grupo de encapuchados, que le marcaron con una navaja la palabra "maricón" en una nalga entre otras agresiones, declara este viernes ante el juez por un posible delito de simulación de delito.

El joven que denunció una agresión homófoba falsa vuelve al punto de mira

Tras varios interrogatorios policiales, se desmoronó y confesó que se había inventado la paliza para tapar una infidelidad y que las heridas se habían producido durante unas prácticas sexuales sadomasoquistas consentidas que había mantenido con otras dos personas que conoció por redes sociales.

Ante esto, el juez titular del Juzgado de Instrucción número 52 de Madrid abrió una investigación por el delito de simulación de delito, cuando denunció el día 5 de septiembre que había sido agredido cuando entraba en el portal de su casa en el barrio de Malasaña.

Sadomasoquismo y una infidelidad

La presunta víctima, tras las heridas, llamó a su pareja, que le ayudó a curarse y le insistió en ir a un centro sanitario.

Fue en ese momento cuando empezó la versión de que unos encapuchados le habían agredido por su orientación sexual, que acabó en delito.

Policía Nacional / EFE

Policía Nacional / EFE

Una vez en el centro de salud, la enfermera que le atendió puso en marcha el protocolo correspondiente, dando aviso a la Policía Nacional, donde el joven denunció con la misma versión de los desconocidos que le habían agredido.

Tras interponer la denuncia en la Comisaría de Centro, la Policía Judicial y la Brigada Provincial de Información iniciaron las pesquisas analizando las cámaras de la calle de la Palma -en la que dijo ser agredido- y tomando declaración a los vecinos y comerciantes.

Declara ante el juez tras meses de investigación

Sin embargo, estas investigaciones no dieron sus frutos, ya que nadie había visto nada y en las cámaras no se veía ningún grupo de las características que el joven relató.

A partir de esto, los agentes empezaron a sospechar y pidieron a la víctima que colaborase y declarase en numerosas ocasiones. Se llegó incluso a investigar a su expareja por si hubiera estado relacionado con los hechos.

Otro de los aspectos que más dudas generaron a los policías es que pidieron al joven la ropa que vestía cuando sufrió la agresión y dijo que la había lavado después.

Agresión homófoba falsa Malasaña / Cuatro al Día

La falsa víctima es entrevistada por una periodista / 'Cuatro al Día'

Finalmente, los agentes le llamaron a declarar y, tras varias horas de interrogatorio, se desmoronó y confesó la verdad, tal y como detallaron fuentes de la investigación.

Ahí fue cuando admitió que había inventado toda la historia para ocultar a su pareja que había sido infiel y que la mentira "se le fue de las manos". Ante la presión mediática decía: "quiero que me trague la tierra".

Podría enfrentarse a penas de prisión por simulación de delito

El juez que inicialmente recibió el parte de lesiones tras la presunta agresión, recibió posteriormente el atestado policial con su confesión y abrió diligencias.

La simulación de delito, tipificada en el artículo 457 del Código Penal, contempla una multa de seis a doce meses de cárcel para la persona que, ante algún funcionario, "simulare ser responsable o víctima de una infracción penal o denunciare una inexistente, provocando actuaciones procesales".

Es diferente a la infracción de denuncia falsa, ya que esta directamente señala o culpa de un delito a una persona o personas concretas.