Un vecino de Burgos de 23 años ha sido detenido este domingo por la Policía Nacional acusado de haber matado a un hombre de 32 de un puñetazo la madrugada del sábado, en la plaza de Huerto del Rey. La víctima, vecino de Valladolid, se encontraba en la ciudad celebrando una despedida de soltero cuando tuvo lugar el suceso. En un primer momento, los investigadores pensaron que se había tratado de una muerte natural, ya que el cuerpo no presentaba signos evidentes de violencia. No obstante, el consiguiente análisis forense reveló que la causa había sido un fuerte golpe en la cabeza, que lo mató casi al instante.

Gracias al testimonio de varios jóvenes que estaban en la plaza en el momento de la agresión, se ha podido identificar y localizar al presunto culpable esta mañana. La Brigada Provincial de la Policía Judicial de la Policía Nacional española está a cargo de la investigación, y a estas alturas tratan de reconstruir los hechos que han llevado a este fatal desenlace.

Ser vecino de Valladolid, el posible móvil del crimen

Las primeras informaciones de la policía española apuntan a la posibilidad de que el origen de la víctima fuera el desencadenante del brutal golpe que puso fin a su vida. Y es que la víctima era de Valladolid, hecho que habría provocado un ataque desmesurado por parte del detenido. "La condición de vecino de Valladolid de la víctima pudo ser el desencadenante", según la policía.

La investigación, de todos modos, continúa en marcha. El trabajo de la policía está siendo muy complicado, ya que la mayoría de los testigos que han podido localizar iban bajo los efectos del alcohol, y la calidad de su relato deja ciertas dudas que todavía no se han podido resolver. El arrestado, mientras tanto, está en comisaría esperando a ser puesto a disposición judicial, una vez se tenga el atestado policial completo.