Desde este verano, la región metropolitana Nord de los Mossos d'Esquadra ha incorporado a su organigrama una nueva figura de mando que permite, las 24 horas del día, tener un subinspector como jefe de turno operativo para todas las comarcas que abarca esta región extensa, compleja y, en algunos lugares, también complicada. Se trata del indicativo Congost 3, una posición que han asumido ocho subinspectores que, en diferentes turnos, lideran los servicios más complejos y críticos para aumentar la presencia de jefes operativos en la calle y reforzar los momentos más tensos, sobre todo, en las tardes y noches.
Esta figura, con similitudes con el Comtal 5 de la ciudad de Barcelona, está en marcha desde julio de 2024 en la región metropolitana Nord, que capitanean el comisario Sergi Pla y el intendente Toni Sánchez. ElCaso.com ha podido seguir de cerca, este viernes por la tarde, un turno con uno de los ocho subinspectores que asumen este nuevo rol.
Una tarde con Congost 3
César, curtido en Tráfico y en los últimos años en Seguridad Ciudadana, comparte despacho y, sobre todo, calle, con otros subinspectores que también hacen de Congost 3, procedentes de otras disciplinas, como Información, orden público o seguridad ciudadana de otras regiones. Es una manera de seguir aprendiendo y mejorando como policías en esta nueva responsabilidad, nos explica.
La figura de Congost 3 -del indicativo regional y de la posición en el organigrama territorial, siendo el 1 y el 2 el jefe y subjefe regionales- está pensada para ofrecer a los jefes de turno de todas las diversas comisarías de la región un nivel más de mando en situaciones e incidentes que, por su complejidad o criticidad, necesiten la activación de recursos regionales, la toma de decisiones más complicadas o que puedan afectar a más de una comisaría. Este paraguas regional permite a los agentes que actúan en el día a día en la calle tener una visión menos focalizada y, al mismo tiempo, disponer de un subinspector en la calle, codo con codo con ellos, que puede asumir el liderazgo de intervenciones más complicadas. Hasta ahora, por las tardes o noches, el máximo mando operativo, un subinspector, se encontraba en la sala de coordinación y no pisaba la calle, una inercia que se ha querido cambiar con esta figura que ya se ha implementado en todas las regiones policiales del país.
Una región complicada y compleja
A diferencia de la ciudad de Barcelona, con muchos más dispositivos, casi diarios, en la región metropolitana Nord -con sede en Granollers-, el trabajo que debe asumir el jefe de turno regional operativo es más de seguimiento de los incidentes y de poder desplazarse hasta el lugar cuando es necesario y el servicio así lo reclama. Sobre todo en incidentes graves, como homicidios, heridos graves, presencia de armas de fuego, peleas, atrincherados o disturbios y problemas de orden público. El mapa de la región -los dos Vallès, el Barcelonès Nord y el Maresme- complica esta movilidad del jefe de turno y, por eso, se ha duplicado la figura para poder dar cobertura a todo el territorio.
Más allá de responder a los incidentes más críticos -durante el seguimiento de este reportaje, no se produjo ninguno (con el cambio de turno, el trabajo se fue acumulando con un accidente de tráfico mortal en Caldes, una persecución con disparos en Barberà del Vallès y una pelea con heridos en Terrassa)-, los encargados de ejercer la figura de Congost 3 no solo ofrecen asistencia a los mandos de las diferentes comisarías en caliente, también velan por el seguimiento posterior, informan de los incidentes a los jefes regionales y despliegan las indicaciones y órdenes de los planes diseñados por la región, del binomio Pla y Sánchez, o de la Prefectura, con el comisario Miquel Esquius.
César nos explica que también tienen el encargo de poner especial interés en aquellas actuaciones donde los implicados, sobre todo las víctimas, sean personas vulnerables o que los delitos se enmarquen en violencia sexual o de odio, para activar todos los protocolos y mecanismos del cuerpo de los Mossos d'Esquadra para protegerlas.
Tres emisoras a la vez
En el interior del vehículo patrulla, suenan tres emisoras a la vez. Hay que estar pendiente de todas. El conductor, un agente de la comisaría de Granollers, apunta algún dato si es necesario al subinspector. De fondo, siempre la emisora de los agentes de Tráfico. Y dos más, la de la región donde se encuentran en ese momento y la más cercana o la que hay que seguir por algún incidente en marcha. Cuando Congost entra en alguna comarca, avisa por emisora a la sala y al jefe de turno que está en la zona. Aunque hace poco que Congost 3 está en marcha, César ya acumula historias. Incidentes que parecen fáciles, pero que se complican y que demuestran la necesidad de un jefe de turno operativo regional.
A finales de verano tuvieron que organizar apresuradamente, con la colaboración de unidades de orden público y agentes de dos comisarías diferentes, la evacuación de una persona de un camping para evitar que fuera linchada por sus vecinos del resort. Una fiesta mal gestionada y un supuesto abuso sexual acabaron con un incidente que requirió la activación de la policía para evitar una desgracia. La necesidad de activar recursos regionales, como el Área Regional de Recursos Operativos (ARRO) y agentes de diversas localidades, evidenció la importancia de tener un mando operativo a pie de calle y el acierto de haber superado el sistema anterior, en el que solo había un mando con rango de subinspector en la sala, sin contacto directo con el incidente.
Una tarde tranquila
Tal como se puede ver en el vídeo de este reportaje, durante el turno de trabajo, Congost 3 y su conductor no se han aburrido. El mismo César, terminando la jornada, otra vez en la comisaría de Granollers, confiesa que no es habitual lo que ha pasado este viernes. Una tarde tranquila en la que la mayoría de servicios a los que han acudido han sido por proximidad o bien detenidos por un ciudadano que ha pedido ayuda. Una supuesta violencia doméstica en Mataró, una alarma en un local comercial de Badalona, un robo en el interior de vehículos, también en Badalona, y, el último, el más peligroso, un incidente con un arma de fuego en el barrio de la Salut, también en Badalona. Aquí puedes leer todos los detalles de este último caso, con la intervención de un arma de fuego a un ciclista multirreincidente.
Al final del turno, César pasa el relevo a un compañero que hará de Congost 3 durante toda la noche, hasta la mañana, cuando será relevado de nuevo. Las tardes, las noches y los fines de semana son los momentos en que esta figura cobra más importancia, para disponer de un mando operativo a pie de calle, reforzar la escala de mando y asesorar o tomar las decisiones complicadas en los momentos más difíciles.
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