A veces un simple detalle puede dejar al descubierto a un peligroso delincuente que hacía tiempo que se escondía para no ser detenido. Eso es lo que ha pasado en Elche, donde una infracción de tráfico provocó la detención de un hombre buscado por cometer un homicidio en Rumania. El arresto se produjo después de que unos agentes de la Policía Local que estaban haciendo tareas de vigilancia en el barrio del Carrús pillaran al individuo circulando contra dirección con su patinete eléctrico. Cuando le pidieron que se detuviera, el hombre se puso nervioso y huyó por encima de la acera, poniendo en riesgo a los peatones.

Uno de los agentes policiales empezó a perseguir al hombre a la carrera, pero al cabo de pocos metros el conductor perdió el control del patinete y se cayó al suelo. Sin embargo, se resistió violentamente dando patadas al policía, que sufrió lesiones y necesitó la ayuda de su compañero para poder reducirlo. Los agentes le pidieron que se identificara, pero el hombre se negó. Al registrarlo, descubrieron que llevaba encima cuatro envoltorios de papel de aluminio que contenían marihuana, motivo por el cual quedó detenido. Durante el traslado a comisaría, el individuo siguió con una actitud desafiante y amenazó a los policías con matarlos con un machete o contratando a unos sicarios para que los atropellaran.

Buscado por un homicidio en Rumania

Al llegar a comisaría, sin embargo, saltó la sorpresa. Al comprobar sus huellas dactilares para tratar de identificar si estaba fichado, descubrieron que no era un simple traficante de droga que había cometido una infracción de tráfico, sino que sobre él pesaba una orden de detención nacional emitida por el Juzgado Central de Inspección número 3 de Madrid acusar de ser el presunto autor de un homicidio en Rumania. Ante esta situación, el hombre, de 39 años, quedó detenido y fue puesto a disposición judicial.