"Un poco de España en Londres", "Delicioso" o "Joya escondida" son algunas de las reseñas de clientes internacionales que probaban los platos del Bar Gansa de Londres, un local de tapas con cocinero español ubicado en pleno Camden Town. Pero las reseñas en español cambian un poco y hacen saltar las alarmas: "Horrible no, lo siguiente", "penoso".
Alberto Chicote prueba las "peores patatas bravas" en Londres
Alberto Chicote, el reconocido chef español, que el pasado año arrasó con su programa en La Sexta Te lo vas a comer, decidía en uno de sus capítulos comprobar la mala calidad de la tapa española más conocida.
"Horrible no, lo siguiente. Si lo que queréis es probar comida española, huid de este sitio. No he probado peores patatas bravas en mi vida", era la reseña más salvaje y reciente en TripAdvisor, la que incitó a Chicote a acudir al establecimiento. Se sienta en la terraza y después de leer la carta decide pedir lo más típico para poderse hacer una idea de la calidad de los platos: croquetas, pisto, tortilla de patatas y las famosas bravas.
Un cocinero español en Reino Unido: la receta de la salsa
En el momento de la cata, el cocinero se sorprende al probar unas croquetas de jamón sabrosas y con trozos del embutido, una tortilla muy buena, un pisto curioso con una especia que no identifica pero con buen sabor y las patatas...
A nivel estético se ven patatas en dados fritas, con un aspecto bastante normal y comparable con cualquier bar o restaurante español de buena calidad. Sin embargo, al probarlas, Chicote solo puede estar de acuerdo con el cliente que se quejaba y las calificaba como las "peores de su vida".
El cocinero prueba la salsa continuamente, describiendo que no entiende el sabor, que es incluso dulce, que realmente son para olvidarlas y horribles. Y pide a la camarera hablar con el chef del restaurante. Un joven andaluz sale del local y empieza a hablar con Alberto, que le pregunta por la especia del pisto que no había captado.
Un perfil más bajo para el público internacional de la ciudad
Acaban concluyendo que se trata de pimentón o paprika, que hacían al catador confundirlo con un aliño moruno. Y llega el delicado momento de las patatas bravas, que el expresentador de Pesadilla en la cocina trata con bastante suavidad. Entonces el joven cocinero revela la receta de la salsa que las convierte en "horribles": ketchup, mayonesa, naranja y brandy.
Una mezcla sorprendente e inesperada para cualquier persona que haya probado unas clásicas bravas de bar en cualquier lugar de España.
El chef del Bar Gansa asegura a Chicote que es muy difícil llevar la gastronomía al mismo nivel con ese tipo de clientes, que prefieren una versión más rebajada de la comida española, hecho que le llevó a mantener un perfil bajo sin mucha apuesta de altura.