Agentes de la Policía Nacional han detenido este sábado a un hombre de 37 años acusado de intentar matar a cuchilladas a su hermano y a su madre en el municipio de Vélez-Málaga. La mujer, que tenía un pulmón gravemente afectado por la puñalada, ha acabado muriendo en el Hospital Regional Universitario de Málaga. Los hechos han tenido lugar alrededor de las nueve y media de la mañana en un domicilio de la calle Domingo Heredia y varios vecinos han alertado al 112 explicándoles que una vecina del edificio había salido al rellano pidiendo ayuda y llena de sangre después de una pelea familiar. Inmediatamente, se han activado efectivos sanitarios, así como varias patrullas de la Policía Local y la Policía Nacional.
Al llegar a la vivienda, los servicios de emergencias se han encontrado tres personas de una misma familia heridas por arma blanca, la madre de 54 años y sus dos hijos de 37 y 34. Los agentes policiales han podido averiguar que ha sido el hijo mayor, que sufre problemas de salud mental, quien ha atacado a su hermano y a su madre con un cuchillo por causas que se desconocen y después se ha autolesionado. El hijo pequeño ha tenido que intervenir y forcejear con su hermano para poder arrebatarle el cuchillo antes de que la agresión fuera a más y los acabara matando. Los tres han sido trasladados a un centro sanitario, en el cual el agresor se encuentra bajo custodia policial.
Un hombre mata a tiros su expareja y después se suicida en Málaga
Este mismo sábado, la provincia de Málaga se ha visto manchada por la lacra de los crímenes machistas. En la localidad de Pizarra, un hombre de 52 años ha matado a su exmujer, de 49, disparándole dos tiros en el pecho a las puertas de su casa cuando volvía de una fiesta de cumpleaños con su hija. Posteriormente, se ha suicidado. Víctima y agresor hacía una década que estaban separados, aunque ella había decidido empezar los trámites del divorcio hace poco, lo que todo parece indicar que habría sido el detonante del asesinato. La pareja tenía dos hijos en común, un chico de 23 años y una chica de 16, que presenció cómo su padre mataba a su madre.