Un médico del centro de salud de Arahal (Sevilla) sufrió una agresión por parte de un paciente al que intentaba atender este sábado. En torno a las seis de la tarde del día de Reyes, un hombre acudió a urgencias pidiendo asistencia sanitaria. El médico en cuestión salió a atenderlo inmediatamente, pero el paciente se puso muy violento, tirándole una botella de agua y golpeando las paredes y el mobiliario de la sala. A pesar de esta actitud, el médico lo siguió hasta el parking cuando el paciente se marchó, y fue entonces que sufrió el intento de atropello.

Desde el Servicio Andaluz de Salud (SAS) han denunciado este episodio, condenando "cualquier tipo de violencia, tanto físico como verbal, dentro o fuera de los centros sanitarios". El presunto agresor fue detenido por la Guardia Civil, después de que desde el citado centro activaran el Plan de Prevención y Atención ante Agresiones, alertando al cuerpo policial del incidente.

Un paciente muy agresivo

Según las declaraciones, tanto del médico víctima de la agresión como del resto de pacientes que se encontraban en aquellos momentos en la sala de urgencias, el hombre llegó con su coche al centro, y pidió ayuda ya desde el parking. Varias personas se adelantaron y avisaron a los sanitarios de urgencias de lo que pasaba. Uno de los médicos salió a la sala inmediatamente, pero el hombre ya estaba en un estado de mucho nerviosismo, llamando y golpeando las paredes y los muebles.

Al ver al médico, le tiró una botella de agua en la cabeza, y empezó a insultarlo mientras seguía destrozando todo lo que encontraba a su alrededor. Al cabo de un rato decidió abandonar la sala y volver al parking. El sanitario fue detrás de él, ya que todavía intentaba ayudarlo, pero el hombre no se lo tomó bien y arrancó el coche dirigiéndose directamente hacia él con la intención de atropellarlo. La víctima esquivó por los pelos el vehículo, que acabó estampándose contra una columna. Eso dejó fuera de juego al conductor, que pudo ser detenido por la Guardia Civil pocos minutos después.