Xavi Jiménez es el hombre imputado por haber participado en el crimen de la bibliotecaria de Sabadell (Barcelona). Se le acusa de haber asesinado a Helena Jubany en el 2001. Este viernes ha pasado a disposición judicial y se ha determinado que "hay indicios suficientes para determinar que el acusado participó en el asesinato", explica el juez instructor, que lo ha dejado en libertad con cargos.

Han salido a la luz las múltiples contradicciones y mentiras de Xavi Jiménez: es incapaz de demostrar dónde estaba el día del crimen. El día que desapareció Helena Jubany, en diciembre del 2001, declaró que estaba con un amigo suyo de la Unión Excursionista de Sabadell, Jaume Sanhellí, que según el hermano de la víctima, lo ayudó a encubrir el crimen.

Jaume Sanhellí cambia su versión para hacerla cuadrar con la de Xavi

Según explicaba Xavi Jiménez hace 20 años, después de pasar el día con Jaume, se fue a dormir a casa su padre. No obstante, Sanhellí dijo una versión diferente de la del sospechoso, motivo por el cual la cambió para hacerla cuadrar con la del presunto autor de los hechos, explica el hermano de la víctima.

Xavi Jiménez es el autor de los anónimos que recibió Helena Jubany antes de ser asesinada

A todo eso sumarle que las investigaciones de la Policía Nacional han determinado que Xavi Jiménez fue quien escribió los dos anónimos que la bibliotecaria de Sabadell recibió antes de ser asesinada.

Esas cartas anónimas iban acompañadas con bebidas que contenían benzodiacepinas, una sustancia que fue encontrada en grandes cantidades en el cuerpo de Helena Jubany y, por lo tanto, hay una clara relación entre las cartas y el asesinato. A pesar de la evidencia científica de estas pruebas, Xavi sigue diciendo que él no es quien las escribió.

Un testigo desmonta la coartada del sospechoso del crimen de la bibliotecaria

Por si no fuera poco, Joan Jubany, el hermano de Helena, asegura que hay un testigo que desmonta la frágil coartada de Xavi: se trata de un amigo del sospechoso que afirma que estuvo con él la tarde que Jiménez asegura haber sido con Sanhellí. Se trata de un testigo que puede ser clave para saber qué pasó aquella noche de diciembre del 2001.

Xavi Jiménez es el único imputado por el asesinato de Helena Jubany, la bibliotecaria de Sabadell que murió con 27 años: hay muchas contradicciones en su declaración y es incapaz de demostrar dónde estaba el día del crimen/ Cedida

El sospechoso del crimen, en libertad con medidas cautelares

El padre de Xavi Jiménez tiene demencia senil y, por lo tanto, es incapaz de recordar si la noche de los hechos Xavi estaba durmiendo en su casa o no y, por lo tanto, el sospechoso del crimen no puede demostrar su coartada. Como el juez instructor ve indicios suficientes de que participó en el asesinato, lo ha dejado en libertad con medidas cautelares: le ha retirado el pasaporte y se tendrá que presentar en los juzgados siempre que sea requerido.

Por otra parte, la familia de la víctima ha explicado pedirán nuevas pruebas para demostrar la autoría de Xavi. Estas pruebas son análisis de la ropa de la Helena para ver si encuentran coincidencias de ADN y la geolocalización e intervención de los móviles que tenían los sospechosos la noche que Helena Jubany fue asesinada.

"La estrategia de Xavi Jiménez es poner palos en las ruedas"

"La estrategia de Xavi Jiménez es poner palos en las ruedas y en ningún caso hay voluntad de colaborar con la justicia", concluye Joan Jubany, que ha remarcado que el crimen de su hermana es un feminicidio y ha pedido que se haga justicia.