La Guardia Civil de la comandancia de Mallorca recibió, este jueves 4 de diciembre a las doce del mediodía, el aviso que informaba de la aparición del cuerpo sin vida de un hombre en el interior de una discoteca abandonada de la isla balear. Los servicios de emergencia se desplazaron al lugar de manera inmediata y, después de atender a la víctima, solo pudieron constatar su muerte. Se trata de un hombre de 65 años, de nacionalidad húngara, que según las primeras diligencias, habría fallecido tres días antes del hallazgo a consecuencia de una caída desde varios metros dentro del edificio. La policía mantiene ahora una investigación abierta y, de momento, descarta que en el deceso hayan participado otras personas.
Según ha informado el Diari de Mallorca, el cadáver se encontró en la antigua discoteca Es Fogueró, situada en el Puerto de Alcúdia y que hoy en día está ocupada por numerosas personas sin hogar. De hecho, el hombre húngaro que apareció muerto sería un indigente que pasaba las noches en lo que queda de la sala de fiestas.
Es Fogueró fue un local nocturno muy reconocido a finales de los años ochenta y acogió a artistas de renombre, pero con el paso del tiempo quedó abandonado. El edificio, ahora, presenta graves desperfectos en la estructura: barandillas rotas, techos inestables y zonas que hace tiempo que dejaron de ser seguras. De hecho, en noviembre de 2024, una persona resultó herida de gravedad tras caer del techo del edificio.
No es el primer crimen
En junio de 2010 la historia de Es Fogueró sufrió la primera mancha de sangre que se recuerda: Agustín González Martínez apareció muerto en la sala, que según el Diari de Mallorca, ya estaba abandonada. Aunque en un primer momento la causa principal de la muerte parecía una caída accidental por las escaleras, la autopsia reveló, más tarde, que el hombre había sido asesinado con un fuerte golpe en la cabeza tras una discusión, provocado por un objeto contundente.