El subdelegado del Gobierno en Valladolid, Emilio Álvarez, ha informado este domingo de que no están previstas más batidas para buscar algún indicio sobre la desaparición en Traspinedo (Valladolid), desde hace más de dos semanas, de Esther López, de 35 años, aunque no se descartan "si fuera necesario".

La Guardia Civil, que continuará la búsqueda con sus propios medios, considera que las zonas en las que están justificadas este tipo de batidas ya se han registrado lo suficiente, ha explicado el subdelegado a los periodistas tras asistir esta tarde en Traspinedo a una concentración de apoyo a los familiares de la desaparecida.

Si fuera necesario se retomarían, pero por ahora se están realizando registros selectivos de zonas que puede hacerlo la propia Guardia Civil con sus medios, sin la colaboración ciudadana como ha ocurrido ya en cuatro ocasiones, la ultima este pasado sábado.

La búsqueda de Esther

La última batida peinó la zona oeste del lugar en el que desapareció la señal del móvil de López, con la participación de unas 600 personas entre agentes de la Guardia Civil, voluntarios de Cruz Roja, de Protección Civil y cientos de vecinos de Traspinedo, aunque no se encontró ningún indicio.

Esther López / Twitter

Esther López / Twitter

El subdelegado ha recalcado que la investigación continúa abierta "en todos los frentes" y "con todos los medios", actualmente a la espera de que lleguen los resultados de laboratorio que, aunque suelen tardar, en esta ocasión "el caso tiene prioridad absoluta" y "en unos días" podrían conocerse. 

Varias de las personas que han participado en las batidas lo han hecho con perros de rastreo, drones e incluso se ha llegado a usar un helicóptero. El objetivo es poder encontrar cualquier pista que ayude a encontrar una pista que pueda llevar a los agentes hasta el paradero de Esther.

¿Cómo va la investigación del caso?

Después de la desaparición de Esther se investigó a una persona que era el principal sospechoso de los agentes. Era un hombre que vivía cerca del lugar en el que vieron a López por última vez después de una noche de fiesta. Se trata de un individuo que tenía antecedentes policiales y que es conocido como 'El Manitas'. Pese a ello, fue puesto el libertad vigilada al no poderlo relacionar directamente con la desaparición.

El segundo sospechoso es un hombre que es conocido por sus iniciales, C.L.G. Declaró cinco veces como testigo y la sexta lo hizo como investigado. No ha sido detenido por los agentes de la Guardia Civil, pero las autoridades lo consideran sospechoso.

Es una persona del entorno cercano de la víctima y se seguirá investigando para saber si está relacionado con la desaparición de Esther. No se ha confirmado, pero todo apunta a que este hombre estuvo con López la noche que desapareció después de salir a tomar unas copas.

Recientemente, los agentes de la Guardia Civil han investigado a fondo el coche de 'El Manitas', un BMW de color oscuro. En busca de algún indicio de que Esther López estuvo en algún momento en el vehículo del que fuera el primer sospechoso.