Tarde de domingo movida en Sant Antoni de Calonge. Hacia las siete de la tarde, los Mossos d'Esquadra recibieron el aviso de que había una persona retenida contra su voluntad en una casa de este municipio del Baix Empordà. Según los testigos que alertaron a la policía, los presuntos secuestradores podrían tener armas de fuego. Tras varias comprobaciones, y según ha podido saber ElCaso.com, los Mossos confirmaron que había una persona retenida y, ante la posibilidad de que los implicados estuvieran armados, activaron el Grup Especial d’Intervenció (GEI), la unidad especializada en incidentes críticos de la policía catalana.

Con la colaboración de equipos de la ARRO de Girona, los operadores del GEI asaltaron la casa donde tenían al hombre retenido y lograron liberarlo sin que hubiera que lamentar heridos. Una vez asegurado el inmueble, se detuvo a dos personas, dos hombres de nacionalidad española, según ha podido saber este medio. Durante el registro de la vivienda, los Mossos encontraron varias bolsas llenas de marihuana —que uno de los detenidos aseguró que utilizaba para vender— y cuatro armas de fuego dentro de un armario: una escopeta del calibre 12, un revólver y dos pistolas, todas con munición. El material fue intervenido para investigar su procedencia e intentar relacionarlo con otros hechos delictivos.

Por ahora se desconoce cómo acabó la víctima en esta casa de Sant Antoni de Calonge. La investigación ha sido asumida por la Divisió d’Investigació Criminal (DIC) de la región de Girona. Todo parece indicar que el caso está vinculado al tráfico de drogas, y se sospecha que el hombre retenido habría tenido un negocio fallido con sus captores. No se llegó a pedir ningún rescate, por lo que policialmente se trata como una detención ilegal, y no como un secuestro, a la espera de las declaraciones de los implicados y de las diligencias que ahora lleva a cabo la DIC para esclarecer este nuevo incidente con armas de fuego y de alto riesgo en Catalunya.

Incidentes con armas de fuego cada día en Catalunya

Este es el tercer incidente con armas de fuego conocido en pocas horas en Catalunya, concretamente en la región de Girona. El viernes por la noche, un menor de edad resultó herido de un disparo en el pecho en Figueres mientras, con otros jóvenes, manipulaban un revólver en la vía pública. Los Mossos investigan cómo tuvieron acceso a un arma de fuego real y con munición, y de dónde había salido. En la Font de la Pólvora, el barrio más conflictivo de Girona, dos personas armadas dispararon al aire la noche del sábado al domingo. No pudieron ser detenidas. Los Mossos llevan meses alertando de que la problemática de las armas de fuego en Catalunya entra en una fase crítica. Cada día hay incidentes, y cada vez con más heridos. Hace pocos días, en Olesa de Montserrat (Baix Llobregat), en un tiroteo relacionado con la marihuana, un joven fue asesinado a tiros.