El futbolista de primera división Santi Mina, de 25 años y delantero en el Real Club Celta de Vigo, se enfrenta a hasta ocho años de prisión por agredir sexualmente a una mujer en Mojácar, Almería, en verano de 2017.
Santi Mina, futbolista del Celta de Vigo, al banquillo
Según el documento de calificación provisional de los hechos, Santi Mina, natural de Vigo y actual jugador de primera división, estaba de vacaciones en Mojácar, Almería, en junio de 2017.
Presuntamente, la madrugada del día 16 de junio de 2017, entró a una caravana estacionada en las proximidades de una conocida discoteca de la ciudad almeriense, y en la que estaba "su amigo", el también futbolista David Goldar, y la víctima.
La Fiscalía de Almería afirma que el joven habría entrado "completamente desnudo" y que, "con ánimo libidinoso para satisfacer su apetito sexual y a pesar de la manifiesta voluntad contraria de la víctima", se habría dirigido a ella diciéndole "mira, chica, tú me gustas mucho y creo que deberíamos hacer algo". Pero la víctima le contestó que estaba en la caravana "con David" y no con él.
Delito de agresión sexual en Mojácar
Entonces, según las declaraciones de la mujer, el acusado salió "un minuto", para luego volver a entrar al vehículo, repetirle que "le había gustado mucho" y agredirla sexualmente.
A consecuencia del ataque, la Fiscalía explica que la víctima padeció lesiones físicas y aún en el presente sufre síntomas de ansiedad grave relacionada con los hechos. Por eso solicita que se le indemnice con 50.000 euros. Resalta que la chica sufre un "trastorno de estrés postraumático crónico directamente relacionado" con la agresión sexual, que afecta a su vida cotidiana.
Ocho años de prisión y diez de libertad vigilada
En cuanto a David Goldar, el futbolista que estaba con Mina y la chica cuando tuvo lugar la agresión, en 2019, el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Vera, Almería, acordó seguir con un procedimiento penal contra él. Sin embargo, la Fiscalía no ha acusado a Goldar y lo propone como testigo en el juicio.
Por un delito de agresión sexual, el Ministerio Público de Almería pide ocho años de prisión y una medida de libertad vigilada durante diez años y que se le prohíba acercarse a menos de 500 metros a la víctima o comunicarse con ella por el mismo periodo de tiempo.
El procedimiento ha recaído en la Sección Tercera, que está a la espera de la apertura del juicio, ya que la defensa de Mina aún no ha presentado sus conclusiones provisionales, según han informado fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía.