Un fuerte olor a gas ha acabado destapando una plantación de marihuana que había escondida en la urbanización Vilafortuny de Cambrils, en el Baix Camp. El pasado sábado, 25 de febrero, los vecinos se alertaron al notar un fuerte olor que se extendía por la calle Sevilla. En un primer momento, se pensaron que era olor a quemado y que se podría haber producido un incendio en alguna de las viviendas, motivo por el cual alertaron a los servicios de emergencias. Hasta el lugar se desplazaron agentes de la Policía Local de Cambrils y una dotación de los Bomberos de la Generalitat, que solo llegar detectaron que aquel olor no era de quemado, sino de gas, y que se podría haber producido un escape en algún sitio.

El olor a gas acabó descubriendo una plantación de marihuana interior

Los bomberos empezaron a seguir el rastro de la peste para saber de dónde procedía. Eso los llevó hasta una casa, de donde tres personas huyeron corriendo solo verlos llegar, según detalla el Diari de Tarragona. Eso hizo saltar todas las alarmas y rápidamente se activaron varias patrullas de la Policía Local, que les empezaron a perseguir. Poco después, pudieron ser localizados y detenidos. Se trata de tres hombres de 23, 27 y 39 años. Ante el intento de huida, los policías sospecharon que en aquella vivienda se podría estar cometiendo alguna ilegalidad, concretamente que hubiera una plantación de marihuana escondida.

Por este motivo, se pidió la colaboración a los Mossos d'Esquadra para poder entrar. Durante varias horas se estuvo haciendo vigilancia preventiva en el exterior de la casa, hasta que al día siguiente recibieron autorización judicial y pudieron acceder al inmueble para confirmar sus sospechas. Dentro de la vivienda había una plantación interior de marihuana con 301 plantas en diferentes fases de crecimiento y 57 kilos de cogollos. Por este motivo, los tres detenidos el día anterior fueron acusados de ser los presuntos autores de un delito contra la salud pública.