Nuevo caso de empadronamientos fraudulentos en Catalunya. La Policía Local de Arenys de Mar ha podido descubrir un fraude en el padrón municipal en el que más de una decena de personas se habrían registrado como habitantes en dos pisos de la localidad cuando, en realidad, no vivían allí. Detrás de todo ello hay dos hombres de nacionalidad española que se empadronaron en estas viviendas, ubicadas en dos edificios vacíos, utilizando unos contratos de alquiler falsos y sin que el propietario estuviera al tanto.
Una vez ya estaban inscritos, se dedicaban a empadronar con ellos a tantos inmigrantes como pudieran. Lo hacían aportando certificados de convivencia que acreditaban que, aunque no figuraban en el contrato de alquiler, también vivían allí. De esta forma consiguieron inscribir a seis personas más en cada uno de los pisos. Desde la Policía Local, sin embargo, empezaron a investigarlo rápidamente, cuando se detectó la anomalía a mediados de noviembre, y contactaron con los propietarios de las dos viviendas. Ninguno de los dos sabía nada del tema y aseguraron que, aunque en la documentación figuraban sus datos personales, se trataba de contratos de alquiler falsos, que nadie vivía en los pisos y que no sabían quiénes eran esas catorce personas que había empadronadas
Los dos hombres que falsificaron los contratos, desaparecidos
Ante esta situación, los dos hombres españoles que se habían empadronado primero con los contratos de alquiler falsos quedaron bajo investigación por un delito contra el derecho de los ciudadanos extranjeros, por falsificación de documentación pública, por fraude a la administración pública y por defraudación a la seguridad social. A estas alturas, sin embargo, los dos hombres están en paradero desconocido. El caso ya ha sido puesto en conocimiento tanto de los Mossos d'Esquadra como de la Policía Nacional, que serán los encargados de llevar la investigación a partir de ahora. Por el momento se desconoce si estos dos hombres cobraban por empadronar a los inmigrantes de Nepal o si pueden formar parte de alguna mafia. Por su parte, desde el Ayuntamiento apuntan que se pudo actuar con celeridad al detectar el caso y antes de que se pudiera tramitar la obtención ilegítima de ayudas o documentación de residencia.