Dos vecinos de Barcelona,de 58 y 64 años, han sido detenidos este fin de semana por la policía de Andorra cuando intentaban volver hacia Catalunya después de haber hecho una escapada al Principado. No lo consiguieron, sin embargo, ya que fueron parados por una patrulla el sábado por la tarde, justo cuando llegaban a la frontera, junto al río Runer. Los agentes les pidieron la documentación y decidieron registrar su vehículo, una furgoneta bastante sospechosa, registro que reveló que, efectivamente, intentaban colar una cantidad sancionable de tabaco de vuelta a la capital catalana.
Habían modificado el techo de la furgoneta para esconder centenares de paquetes de tabaco
Los arrestados habían modificado su furgoneta añadiendo dos compartimentos ocultos al techo, de manera que quedaban disimulados con el resto de la tapicería y que solo se podía abrir con un destornillador, convirtiéndose en un escondite prácticamente perfecto. A pesar de todos sus esfuerzos, sin embargo, los policías notaron alguna cosa que no cuadraba y revisaron con más detenimiento esta parte del vehículo. Al presionar un poco ya se dieron cuenta del falso techo y lo desmontaron, encontrando un total de 900 paquetes de tabaco valorados en más de 3.500 euros.
Técnicamente, si el valor de la mercancía de contrabando no llega a los 6.000 euros, a los delincuentes solo les cae una sanción administrativa y, por descontado, el decomiso de todo el género. En este caso, sin embargo, como los contrabandistas habían alterado la estructura de la furgoneta con fines delictivos, el valor del tabaco no condicionaba la detención. De esta manera, ambos hombres fueron arrestados, acusados de sendos delitos contra el orden socioeconómico y fueron puestos a disposición judicial.