Bizum es una aplicación móvil muy extendida, que ya supera los 14 millones de usuarios. Los nuevos sistemas de pago instantáneos entre particulares, tipo Bizum -con el móvil-, nos facilitan la vida, sí. En apenas tres segundos puedes saldar tus deudas e ingresar cantidades medianas a cualquiera.
No obstante, en los últimos tiempos se han multiplicado las denuncias por esta modalidad de estafa. En la medida que es mejor prevenir que curar, aquí va una advertencia sobre su posible uso fraudulento.
Inmediatez vs estafa
Cuando la cantidad es pequeña o la persona a la que se le pasa dinero es habitual, hay bancos que no solicitan ningún número PIN extra. Sí en grandes cantidades. La cantidad máxima que se puede enviar al día es de 1.000 euros, pero se puede recibir hasta 2.000 euros.
La clave del éxito de Bizum está en la inmediatez y la sencillez de los pagos, en tan sólo tres segundos. Pero precisamente la rapidez en los envíos y las pequeñas cantidades han hecho de Bizum un blanco fácil y ahora se ha visto envuelto en diferentes modalidades de estafa.
Modus operandi: estafa Bizum
Una de las modalidades más extendidas de estafa, denunciada esta misma semana en la Jefatura Superior de La Rioja, es el procedimiento mediante el cual un supuesto comprador, en este caso de un vehículo, se puso en contacto con el vendedor del mismo, manifestándoles que estaba interesado en su compra, indicándole que le pagaría en "concepto de reserva" la cantidad de 400 euros a través de la aplicación Bizum, aceptando el vendedor el procedimiento. Ahora bien, el supuesto comprador en vez de realizar el pago, en su lugar envía una solicitud de dinero con el objetivo de que su víctima sea quien envíe dicho importe, aceptándolo el vendedor y transfiriendo la cantidad de 400 euros al comprador. Si te ocurre una situación similar, tu coche no está en venta para el "comprador" interesado.
Posteriormente el vendedor, al darse cuenta del error, intenta contactar con el comprador y éste no da señales de vida.
Estafa desde la 'compañía de teléfono'
Otro de los ejemplos más extendido es en que las víctimas reciben una llamada de teléfono desde su compañía telefónica (supuestamente) para rebajarles la factura u ofrecerles regalos.
Si aceptaban la oferta, tienen que facilitar sus cuentas bancarias o tarjetas. Después los estafadores asocian esas tarjetas o cuentas a Bizum. Como se necesita un número PIN para hacer las operaciones tiene que conseguir que las víctimas se lo faciliten de manera inconsciente, creyendo que es un código para activar la oferta de la operadora. Una vez que disponen del número de teléfono, cuenta o tarjeta y el PIN, se realizan las transferencias.
Los estafadores persuaden a los clientes para que se les facilite sus credenciales bancarias, "abusando de su buena fe". Y con ellas, posteriormente, operan en su nombre, haciendo transferencias desde sus cuentas o con Bizum según el caso.
Recomendaciones para combatir a los estafadores
Aquí van ciertas recomendaciones para que los criminales no te engañen.
Primero, si se han facilitado datos bancarios se debe contactar directamente con el banco para que bloqueen tu cuenta y evitar cargos adicionales.
Segundo, vigilar regularmente qué información existe en Internet sobre uno mismo para detectar si los datos privados podrían ser utilizados sin consentimiento.
Tercero, si has instalado algún programa por indicación del supuesto operador, es aconsejable desinstalarlo y evaluar que realmente no existe ningún riesgo.
Cuarto, denuncia en la comisaría más cercana.