Intentar engañar a la policía nunca es una buena opción, pero aún lo es menos cuando llevas quince kilos de marihuana escondidos en el remolque del coche. En Urús, en la Cerdanya (Girona), un ciudadano alemán de 53 años lo quiso hacer el pasado domingo, pero la jugada le salió mal. El hombre fue parado en un control de verificación fiscal que agentes del Destacamento Fiscal y de Fronteras de Puigcerdà de la Guardia Civil montaron a la salida del túnel del Cadí, en la carretera C-16. Los policías ordenaron al conductor del vehículo, un Opel Zafira de color gris con matrícula alemana, que transportaba un remolque ligero, que se dirigiera hacia la zona de registro y control.

Se delata solo mintiendo sobre su documentación

Una vez allí, los agentes pidieron la documentación al conductor y el hombre les entregó un carnet de identidad de Alemania, asegurando que era el único documento acreditativo que tenía. Sin embargo, cuando inspeccionaron el automóvil, los policías encontraron documentación española, concretamente un carnet de conducir y uno del número de identificación de extranjero (NIE), que también iban a nombre del conductor. Por este motivo, viendo las contradicciones y que intentaba engañarles, retuvieron al hombre y lo trasladaron tanto a él como al coche y al remolque hasta el cuartel de Puigcerdà, donde hicieron una inspección más exhaustiva del vehículo.

Al abrir el remolque, descubrieron que disponía de un doble fondo y que dentro había escondidas catorce bolsas envasadas al vacío llenas de cogollos de marihuana, como confirmaron las pruebas de detección de drogas. En concreto, había 14,9 kilos. Ante este hallazgo, el hombre, de quien no se ha facilitado si tenía antecedentes policiales previos, quedó detenido como presunto autor de un delito contra la salud pública por tráfico de drogas. El individuo, tras ser puesto a disposición de los juzgados de Puigcerdà, quedó en libertad a la espera de la celebración del juicio.